Quién se atreve a decirle a una madre...

Publicado el 11 julio 2010 por Ninocactus
La carne rebozada fría no vale nada, le explicamos al camarero cuando nos negamos a abonar el precio del segundo plato. Pidió que esperásemos un minuto, y fue a hablar con el maître el cual, a su vez, avisó al cocinero. Éste, por su parte, llamó al proveedor, quien se puso en contacto con el transportista para que fuese a buscar al ganadero y, así, traer a Florinda la vaca, madre del ternero sacrificado. Cuando vimos su rostro afligido al entrar en el restaurante sacamos rápidamente la billetera... Y hasta dejamos una generosa propina.
NiñoCactus