- 0,5 vasos de azúcar
- 24 bizcochos blandos
- 100 gramos de cacao puro en polvo
- 1 tazón de café sólo
- 3 huevos
- 1 chorrito de licor
- 0,3 litros de nata líquida
- 250 gramos de queso mascarpone
- Echar la mitad del azúcar en la nata líquida y montarla hasta que quede muy compacta (debe estar fría y a ser posible en un recipiente metálico frío).
- Separar las claras y las yemas de los huevos
- Montar las claras a punto de nieve (mejor si se echan unas gotas de limón o vinagre)
- Mezclar despacio con un cucharón el queso mascarpone y las yemas de huevo, añadiendo el resto del azúcar (no utlizar la batidora).
- Cuando el queso y las yemas estén mezclados juntar con la nata montada y las claras a punto de nieve y mezclar todo bien, pero despacio.
- En el café caliente disolver un tercio del chocolate en polvo y echar un chorrito del licor.
- Mojar muy ligeramente los bizcochos en el café sin dejar que se empapen y disponer la mitad de ellos cubriendo el fondo de una fuente.
- Echar la mitad de la mezcla sobre los bizcochos cubriéndolos uniformemente.
- Poner una nueva capa de bizcochos mojados ligeramente sobre la mezcla.
- Echar el resto de la mezcla sobre la segunda capa de bizcochos
- Espolvorear bien el chocolate en polvo sobre la mezcla
- Dejar reposar al menos 6 horas