CAPITULO 2:ABRÍ LOS OJOS Y DEJE DE VERTE!
Eran las 6:48 de la mañana cuando sonó el despertador, yo todavía tenía sueño ayer me acosté muy tarde, y mientras me costaba levantarme olí a café por el pasillo. Mi padre se dirigía a mi habitación a levantarme la persiana, y yo medio dormida me ponía a desayunar, mi café estaba demasiado caliente y las tostadas un poco torradas pero aun así me las untaba de mermelada, más el zumo recién exprimido que me había preparado mi padre. Como no sabía lo que desayunaba me hizo un room service. Yo estaba encantada de despertarme así y que me trajeran el desayuno dejándolo en la mesa de mi escritorio. Había una variación de frutas, lo que más comía era las uvas. Cuando termine de desayunar me empecé a arreglar para ir a trabajar, peinarme era lo que más me costaba todas las mañanas, porque me levantaba con el pelo muy revoltoso, me tiraba medía hora para desenredarme el pelo, otra medía para lavarme los dientes y otra medía para alisarme el pelo y empezar a vestirme, cuando de repente miré el reloj y vi que eran las 7:20 todavía tenía tiempo no entraba hasta las 8:30 así que yo iba con calma tenía todavía tiempo. Recogí todo lo que manché en el cuarto de baño mientras iba a la cocina a picar algo, cuando de repente mi padre me aviso de que llegaba tarde, así que cogí el bolso y salí por la puerta de mi casa para coger el coche con tan mala suerte que se me cayeron las llaves por la rendija de la calle. Volví a subir a mi casa a ver si mi padre podía llevarme o dejarme sus llaves, pero cuando entré en su coche no quedaba gasolina. Así que me volví loca, pensando que podía hacer para no llegar tarde al trabajo ya que yo vivía en una punta y el trabajo estaba en la otra, pensé coger el autobús pero llegaría tardísimo, porque tiene que hacer sus paradas. Me inventé una excusa y no fui, la próxima vez no tardaré tanto en peinarme, maquillarme, vestirme, desayunar y hacerme la remolona en la cama. Cuando se lo dije a mi padre se enfadó muchísimo, porque el siempre dice que el trabajo es lo más importante, y bueno yo siempre he sido una cabeza loca y razón no le faltaba. No podía reprocharle a mi padre nada cuando yo era la menos indicada para hablar aunque para mí, mi padre siempre ha sido y será un héroe porque siguió adelante con sus dos hijas él solo a pesar de todo lo que había ocurrido, sin ayuda de nadie y os aseguro que todavía lo sigue haciendo. Cobraba muy poco dinero de las ayudas que recibía y tener dos hijas siempre ha sido una responsabilidad mayor, porque había muchas cosas que pagar, no solo los gastos que teníamos mi hermana y yo. La hipoteca también había que pagarla, la luz, el agua y todas esas cosas que tienes que pagar cuando tienes un piso a tu cargo. Yo seguía viviendo en mi chalet con vistas pero me llegaban facturas, y ya tenía muchas acumuladas que todavía no había pagado porque siempre me lo gastaba todo en fiestas era muy derrochadora. Mi padre me decía que tenía que pagar las facturas que tenía acumuladas pero cada vez tenía más y más, no pensé bien las cosas así que hasta que no cobré a final de mes no podía pagar nada, pedí a mi mejor amigo Marc si me podía dejar dinero, pero él era como yo una cabeza loca, y todo lo que ganaba se lo gastaba en cervezas, lo único que me pudo dejar eran 200€ pero lo que tenía que pagar era mayor pero al menos me hacía un apaño mientras tanto. Salí hacer un poco de Running por la noche ya que era lo que más me gustaba y me relajaba para poder desconectar de todas las deudas que debía al banco, de repente escuché el nombre de Marta repetidas veces, me gire pero no había nadie yo seguía corriendo y decidí ponerme a escuchar música, me puse los cascos del iPod, y desconecte totalmente de todo lo que me rodeaba mientras escuchaba la canción ‘’Stay’’ de Rihanna. Me senté en un banco del parque y cerré los ojos dejándome llevar por la música me sentó muy bien el salir a correr. Cuando llegué a casa la primero que hice fue pegarme un baño con espuma mi padre ya dormía y yo necesitaba hablar con alguien por todo lo que me estaba pasando así que llamé a mi amigo de la infancia Hugo, aunque no le conté el problema de las deudas, preferí contarle otra cosa para explicárselo y él en 5 minutos ya estaba en la puerta de mi casa, aparte de que estaba loquito por mí y yo no lo sabía. Cuando llegó lo primero que hizo fue abrazarme, yo sentí su olor de colonía que me encantaba y era mi preferida, trajo comida china para cenar, nos pusimos a cenar y charlamos un poco de como iba nuestras vidas ya que desde el picnic no lo volví a ver más le ofrecí una copa de vino y después de varias botellas de vino una cosa llevo a la otra que al final acabamos acostándonos. Cuando me desperté después de la borrachera que llevaba encima no daba crédito a lo que hice, yo tenía mi corazón ocupado por otra persona, y quería a la otra persona, me sentía muy culpable, por lo que hice, pero fue una noche loca no me acordaba de nada solo de un fuerte dolor de cabeza que podía conmigo. Cuando se despertó Hugo le expliqué que todo lo que paso entre nosotros fue un mal entendido que nos dejamos llevar por la borrachera, y que mi corazón estaba ocupado por otra persona. No eran cuernos hacía la otra persona porque no estábamos juntos, pero aun así yo seguía queriendo a la otra persona, y con Hugo no quería nada más que una bonita amistad. Hugo se enfadó muchísimo porque él no entendía por qué le trataba con desprecio y de esa manera yo le expliqué que no era desprecio, que simplemente tenía muchas dudas en mi cabeza y que ahora no me podía centrar en una relación. A lo que Hugo contestó: Tú siempre has sido una cabeza loca y has hecho con los hombres lo que te ha dado la gana’’ para nada era así pero en el amor a veces hay que ser egoísta. Así que Hugo se levantó y se fue sin decir ni media palabra a penas. Hugo estaba loquito por mí, se moría porque yo estuviera con él en una relación pero yo lo había dejado hace poco con su mejor amigo, y todavía le quería, dejo de contestarme a los whatsap, a los mensajes, y a los emails. No entendía a que venía su enfadó ya que como le expliqué yo no podía empezar una relación con él, cuándo ni si quiera era capaz de terminar la mía propia correctamente. No entendía que yo estaba enamorada de su mejor amigo, y que una relación de 3 años no se podía terminar de la noche a la mañana yo todavía le quería aunque la relación no terminase bien, todavía no había nada roto estaba todo en modo ‘’standbye’’. Hugo, tampoco contestaba a mis llamadas intenté localizarle para hablar y no estar enfadados, no me gusta estar enfada con la gente que quiero, paso de los malos rollos, pero él se negó a cogerme el teléfono y yo necesitaba contárselo a alguien entonces acudí a mi vecino y mejor amigo Marc pero vi que me dejó un posit en mi puerta que ponía: No estoy en casa, me he ido de vacaciones, por favor cuídame a coco. Besos. Y yo como siempre tenía una copia de las llaves, pero que morro, tenía mi amigo Marc, quería que le cuidará a coco, hasta que el regresará de sus vacaciones, no es la primera vez que lo ha hecho, lo ha intentado con todo el mundo hasta que me ofrecí yo, mi pregunta era porque no se lo llevaba con el de vacaciones? La verdad que Coco no me suponía ningún problema, ya que es muy buen perro, a pesar de ser un Bulldog Ingles, le quiero muchísimo, pero no sé si lo cuidaré muy bien por decir que no se cuidar ni de mi misma. Mientras Coco se comía mis cascos del Ipod yo me fui a ducharme necesitaba desconexión total, cuando estoy lista para ducharme pican al timbre con tan mala suerte que se cae el jabón y me resbalo. No paraba de preguntarme porque todo me salía mal, las relaciones, la amistad, todo. Cuando fui a abrir la puerta era el cartero, traía una carta certificada del banco, oh no malas noticias! Me iban a desahuciar. En ese momento se me callo la casa encima, y todo por mi mala cabeza de no ahorrar el dinero. Y gastármelo todo en fiestas. No podía creer lo que veían mis ojos una orden de desahucio y como llevaba meses sin pagar las facturas, pues me echaban en 2 meses y mi amigo Marc no venía hasta dentro de 3, me preguntaba una y otra vez que iba hacer con mi vida, y como iba a soluciones este desastre cometido por mis malas acciones. No sabía a quién acudir ya que Hugo estaba enfadado conmigo, mis abuelos no querían ni verme, y mi padre… bueno de el no sé nada desde el último mes, que cogió la maleta la lleno de ropa y una vez más se marchó. Así que prácticamente estaba sola, si tenía a Coco pero estaba sola! Ahogaba mis penas en un helado de chocolate, a penas comía, estaba deprimida, si hubiera hecho las cosas bien esto no me hubiera pasado. Veía como pasaba los días y yo seguía ahí sentada en la silla de la mesa, mirando fijamente la calle. Pasaban los minutos las horas del reloj y yo seguía ahí prostrada en esa silla comiendo helado de chocolate, y con el albornoz azul de mi padre. Apenas hablaba, suspiraba, me llamaban al móvil y no lo cogía, tenía un montón de mensajes de Whatsap yo solo quería dormir. Picaban al timbre pero ni abría, no quería saber nada, de nadie, quería dormir. Me dejaban todas las cartas debajo de la puerta, o en el buzón de fuera a la calle que tampoco lo abría. Me metí en la cama y dormí 8 horas seguidas, notaba como tenía la cabeza mojada, y mis pupilas cada vez se dilataban más y más, como era posible que tuviera la cabeza mojada si realmente estaba en la cama o era solo mi subconsciente que se imaginaba que estaba en la cama? De repente escuché como mi amiga Sara abría la puerta de mi casa, era la única que tenía llave junto con Marc que él siempre tenía una por si me pasaba algo. Escuché como Sara gritaba mi nombre varías veces y yo no le respondía, me busco por toda mi casa hasta que me encontró en el lavabo, la bañera estaba llena de agua y yo apenas podía respirar. Cuando entró Sara me había hundido vio barios pote de pastillas en el suelo, y ella corriendo llamo al Samur para que me vinieran a atender. Sara no podía imaginar cómo había terminado así, cuando yo era muy buena, y el tema de las drogas ni las mencionaba casi. Sara no sabía por lo que yo estaba pasando, entiendo que se asustará al verme dentro del agua, pero mi subconsciente se encontraba en la cama.