Volátiles recuerdos, difuminados entre espacios vacíos, que rellenó mi alma con lo que creí que había vivido. Tengo miedo de que eso que cobija mi corazón cual tesoro borroso con la semicertidumbre de que fue y no lo imaginé, muera con el descubrimiento de la verdad y con el gris de los días que pasan incómodos a veces, planos muchas otras.
Miro con los ojos del presente y ya no veo lo que imaginaba. Miro la certeza y dibujo con el día a día un inexistente futuro mientras lo desdibuja mi corazón, como el viento borra las esponjosas nubes del cielo.
Los recuerdos de un pasado azul y la quimera de la felicidad que creí encontrada, se me escapan de las manos, como si fuese agua.