Estas semanas de pausa me han servido para descansar la cabeza, cosa que me ha venido bastante bien; pero lo más importante es que los asuntos que trastocaban mi precario equilibrio mental parecen solucionados.
La operación de cáncer de pecho de mi madre ha sido satisfactoria según los médicos y ella se recupera de maravilla. Todavía no se sabe si hará falta aplicar quimioterapia, pero independientemente de ello, la enfermedad se ha detectado en un estado precoz lo que casi garantiza la curación total.
Además se ha producido un inesperado e interesante cambio de mi actividad profesional que me va a obligar a invertir mucho tiempo para adaptarme. Pero sarna con gusto no pica. De hecho la inactividad laboral que estaba soportando desde hacía meses me estaba empezando a afectar negativamente.
Quiero pedir disculpas por haber cerrado los comentarios del blog durante un tiempo, pero no me veía con fuerzas para responderlos como se merecen. También quiero agradeceros a todos el interés y el ánimo que me habéis transmitido por otros medios.
Tenía intención de alargar mi ausencia durante varias semanas más, para escribir algunos relatos y de este modo tener material suficiente para darme el capricho de autoeditarme un librito de relatos cortos, pero no he podido aguantarme las ganas de regresar. Así que los iré escribiendo poquito a poco.
He regresado. Eso sí, el ritmo con el que publicaré posts y leeré vuestros blogs será lento. No me alcanza el día para tantas cosas.
Y sí, estoy aprendiendo inglés a marchas forzadas.
I'm back again.