Me fui al museo de arte moderno a ver una exposición de Remedios Varo. Llegue demasiado temprano y me fui a caminar al parque fuera del museo Tamayo que todavía se encontraba cerrado. México DF para mi son helechos, bosques, colores, agujeros en el pavimento rellenos de agua y el amarillo de las banquetas. Había dos chicas paseadoras de perros, salen en equipo y se acompañan, una de ellas pasea a los perritos cuatro horas en la mañana y dos horas en la tarde. Me gusta la energía de los animales que está siempre como llena. Pasa una chica, uno de los perritos le salta y se enoja muchísimo, me cuesta mucho trabajo no distinguir una diferencia de actitud y de clase entre ambas mujeres.
El museo me abre una venita muy rara. Esta Rafael Coronel en la exposición permanente. Y un par de artistas que estaban colgados en mi casa y que fueron esos cuadros por los que mis papás se pelearon y que finalmente mi papá se quedó. Y en la otra ala remedios varo que me recuerda a una parte de mi misma adolescente, un lugar de refugio. Estar aquí invariablemente me recuerda al pasado y son tantas historias encontradas, en la primera parte me encuentro también al dr adler cuyas reproducciones adornaban la casa de mis abuelos. El arte y los dibujos representa tanto mi vida mexicana, mi familia rota, el dolor y el refugio, la violencia.
Malala ya no está. A ella creo que no le encantaba el arte pero siempre se sintió orgullosa y como con la responsabilidad de apoyar y motivar. A veces pienso un poco en el mundo espiritual y el pensar que no la siento y que probablemente no nos volvamos a ver a veces me llena de tristeza. Y a veces el pensar que su núcleo familiar anyway no era un lugar donde yo tuviera un claro lugar también me hace sentir a ratos como una célula solitaria sin pertenencia a ninguna parte. Pertenecería a ti? Donde quiera que estes, me recuerdas con distancia y desencanto? Como fuera de tu familia y de la gente que querías cerca?