Beau Vincent es maleducado y peligroso, el típico chico malo. Entonces, ¿por qué la buena de Ashton, que tiene en Sawyer al novio perfecto, no puede evitar sentirse irresistiblemente atraída por él?
Últimamente están apareciendo muchas reseñas de este mismo libro y la mayoría de ellas (al menos las que he podido ver) positivas. Aunque, también es cierto que, es un género que puede gustar mucho o, por el contrario, llegar a odiarlo. Y, después de haber probado un par de novelas, definitivamente, reconozco que me encuentro en la primera categoría.
Puede que todas sigan el mismo patrón y tengan tal coincidencia que después de haber leído varias se te haga repetitivo, pero hoy por hoy, y en particular, El chico malo, es una novela que me ha enganchado por completo y que he disfrutado muchísimo con su lectura.
Nunca me había molestado en reflexionar sobre lo negra que era mi alma, como parecían creer el resto de los habitantes de esta ciudad, pero en cuanto Ashton salió de su pequeño Jetta blanco con el aspecto de un ángel caído del cielo, supe que mi alma estaba condenada al infierno.
Estoy empezando a considerarme fan de los tríos amorosos y de los celos que se crean entre los personajes. Aunque, quizás, lo que menos me guste de este tipo de libros sea las dudas incesantes que tienen y la falta de autoestima por parte de la protagonista, generalmente, chica como en este caso, Ashton.
Centrémonos un poco en los personajes principales. Por un lado, tenemos a Ashton. La típica chica buena que intenta ser perfecta y agradar a todo el mundo. Sobre todo, a su novio Sawyer que, también es un chico ejemplar. Por desgracia (o no) para Ashton, pronto se dará cuenta que la perfección no es tan buena y que su lado rebelde quiere luchar por salir a flote de nuevo, escondido en lo más profundo de su ser desde que pasó de ser pequeña a toda una adolescente. Todo eso será gracias a Beau, el tercero en discordia. Un chico extremadamente sexy a la par que malo, malísimo. O al menos esa es la apariencia que muestra en un principio aunque, por supuesto, pronto nos daremos cuenta de que es todo dulzura. Beau es el primo de Sawyer y antiguo mejor amigo de Ashton hasta que, ésta y Sawyer, empezaron a salir tres años atrás.La historia está escrita en primera persona, alternando entre dos de los personajes, Ash y Beau. Hecho que nos permite conocer en profundidad a cada uno de ellos y lo que piensan en cada momento.
La atracción entre éstos dos, será inmediata y constante en cada uno de sus encuentros. Pronto se darán cuenta de que, lo que sienten el uno por el otro es más fuerte de lo que nunca hubiesen podido imaginar. Pero, ¿Será suficiente el amor para que Ashton rompa toda una vida de perfección y, Beau, su relación con Sawyer, la única persona que le ha tratado como a un verdadero hermano?.-¿Qué es lo que estamos haciendo, Ash? -dijo Beau con un suspiro.
No estaba segura de cómo responder a eso y en ese momento tampoco lo deseaba.
-Disfrutémoslo -supliqué.
-Haré lo que tú quieras que haga. Siempre lo he hecho -fue su respuesta.
Durante la trama nos encontraremos con todo tipo de sentimientos. Habrá lugar para el amor, el odio, los celos, las dudas, la venganza, el remordimiento… y si, también para disfrutar de una pequeña dosis de erotismo. Las escenas de sexo entre los personajes, debido a que se trata de un género ambientado para un público entre joven y adulto, serán algo más explícitas que las novelas juveniles pero no tan detallada como las propias novelas eróticas.
En definitiva, El chico malo, es una novela realista que conseguirá haceros pasar un buen rato. Una historia con unos personajes muy bien desarrollados y, una lectura adictiva que os dejará con ganas de más.
Agradecimientos a Destino por el ejemplar.
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