El año pasado coincidió con mis vacaciones de invierno, me duró como una semana, una semana sin poder disfrutar el “hacer nada”, sufriendo el estar en cama, panorama contrario al que esperaba vivir. Y este año me sorprendió un poco más tarde, pero coincidió con el paro de mi universidad y carrera, por tanto, no me atrasó con los estudios, menos mal.Es una vez al año que me suelo enfermar, y siempre me sorprende estando en la casa de mis padres, por tanto en cierta manera lo disfruto. Aunque el malestar es grande, es rico sentirse pequeña otra vez, y que te regaloneen harto, te atiendan, se preocupen de ti, etc. De un momento a otro me sentí con 10 años menos, toda una hijita de papá, y es que aún no he vivido una enfermedad sola, cuidándome por mí misma. ¿Ustedes han pasado días en cama solos, cuidándose a sí mismos?
Recuerdo que Freud atribuía cierto narcisismo a las enfermedades, y a la necesidad de ser el centro del universo, de atención, etc. Yo lo veo sólo como el lado amable de estar enfermos, igual no daría días en cama con fiebre por un poco de atención… is too much, no?