Retro análisis Track & Field

Por fin llegaron las olimpiadas y a mi que me gusta mucho ver deporte, ver eh, me vais a leer varios artículos al respecto seguramente. El caso es que hablando de videojuegos y olimpiadas es imposible no volver la vista atrás y acordarse de uno de los juegos mas míticos de la historia de Konami y de los videojuegos en general. Track & Field fue el rey de los arcades durante muchos años, en los que nos dejamos innumerables monedas, pero también llegó a la mítica NES donde pudimos disfrutar de toda la magia de las olimpiadas y de paso destrozar un buen puñado de mandos.

Y es que el término machacabotones nació con esta saga, a lo largo de 8 pruebas basadas en disciplinas olimpicas reales nos deberemos dejar los dedos para lograr una marca que nos consiga clasificar para la siguiente prueba. La mayoría de las pruebas se juegan del mismo modo, machaca los botones sin parar para conseguir velocidad y después realiza una acción concreta en el momento justo requiriendo una rapidez y sobretodo cordinación muy alta que iremos mejorando contra mas partidas juguemos. Cada prueba tendrá una marca mínima para ser superada pero además hay una marca de "record del mundo" que también podremos alcanzar para nuestra satisfacción personal, aunque no para nada mas. En la mayoría de las pruebas tendremos 3 intentos aunque en las de velocidad deberemos vencer a la primera.

Mario y su hermano negro, digan lo que digan

El juego es la ostia de adictivo incluso a día de hoy, superar las distintas pruebas no es demasiado complicado (menos la de salto de altura que se me da fatal) pero ir superando records propios hasta lograr el mundial es una auténtica pasada. Además como en muchos juegos de la época tenemos un modo "B" que es lo mismo pero con una dificultad considerablemente mayor que se traduce en marcas mínimas mucho mas complicadas de conseguir. Por si fuera poco todas las pruebas se pueden jugar a dos jugadores (algunas de ellas simultaneamente) lo que multiplica la capacidad de pique hasta el infinito y mas allá. De verdad quisiera resaltar lo bien que ha envejecido en materia jugable y de diversión un título el año 1987, empezar a jugar a Track & Field es quedarse enganchado irremediablemente.
Las pruebas que contiene el clásico son las siguientes:

• 100 metros lisos: Seguramente una de las puebas olímpicas por excelencia, su funcionamiento es sencillo, aporrea a toda velocidad los botones para llegar con una marca digna a la meta.
• Salto de longitud: Otra de las disciplinas olimpicas mas conocidas, esta vez deberemos primero coger velocidad aporreando como dios manda el mando para luego apretar arriba en la cruceta para saltar, es importante pulsar el tiempo justo (lo ideal es un salto de unos 45º).
• 110 metros vallas: Muy parecida a los 100 metros lisos pero con un montón de vallas enormes en todo el puto medio, se le ocurrió a un genio. Para superar la prueba tendremos que saber combinar el aporrear para correr y el pulsar para saltar.
• Lanzamiento de jabalina: Deporte olímpico homenaje a cuando eramos uno con la naturaleza y matábamos otros animales armados con lanzas (me lo acabo de inventar todo pero puede ser verdad). Parecido al salto de longitud, aporreas para coger velocidad y luego pulsas para lanzar teniendo cuidado con el ángulo de tiro.

Una marca muy normalita

• Tiro al plato: Pues en esta prueba debemos disparar a una serie de platos que se nos lanzan y la mecánica varía bastante con respecto al resto de pruebas. Pasamos de tener que aporrear botones a tener que pulsarlos en el momento justo en el que el plato pasar por nuestra mirilla.
• Triple Salto: Volvemos a las pruebas de atletismo, funciona exactamente igual que el salto de longitud con la diferencia de que esta vez deberemos dar 3 saltos seguidos, en cada uno de los saltos el ángulo es muy importante para lograr buena marca en el final.
• Tiro con arco: Funciona de manera totalmente distinta al resto de pruebas, deberemos pulsar el botón en el momento adecuado y durante el tiempo adecuado para lograr hacer un buen disparo, además deberemos tener en cuenta la fuerza y dirección del viento. Una prueba relajada entre tanta tensión.
• Salto de altura: Un auténtico infierno de prueba, coge velocidad primero aporreando y luego ten la suficiente frescura para hacer el salto correctamente en 3 fases distintas teniendo en cuenta el ángulo, la odio a muerte por que soy un paquete.

Esto es todo lo que ofrece Track & Field, son pocas pruebas comparado con las que ofrecieron los títulos posteriores pero la verdad es que en la época fue todo un pelotazo. Como he comentado antes la diversión de todas y cada una de ellas sigue vigente hoy en día y da gusto echarse unos piques, no es un juego que te vaya a tener días seguidos enganchado pero si es el típico juego que cuando cojas una tarde aleatoria te hará pasar un buen rato.

Tiro con arco

Gráficamente el juego es muy sencillo pero tiene mucho encanto dentro de esa sencillez, me llama mucho la atención el parecido del atleta protagonista con Mario, aunque se lo achaco a que en los 80 los deportistas con bigote eran algo bastante habitual, acordaos de el gran Arteche (que Dios lo tenga en su gloria rodeado de mujeres con bikinis del Atleti) y en general se puede decir que el juego tiene su carisma. El sonido destaca por la inclusión de una versión chiptune de la mítica Carros de Fuego de Vangelis en la pantalla de título que os pondrá la piel de gallina, por contra los efectos sonoros del juego son muy limitados, en la linea de casi todos los juegos de la veterana 8 bits de Nintendo.
En resumen Track & Field es un juegazo hoy como lo fue ayer, la mecánica sigue siendo perfecta y la diversión a prueba de bombas. Solo se queda muy corto en cuanto al número de pruebas con respecto a los títulos de hoy en día pero hay que reconocer que no es de extrañar el éxito que tuvo el título en su día. Si tenéis una tarde de estas que estáis mirando al techo sin hacer nada en particular echarle un tiento vía emulador, veréis que rato mas majo echáis.
NOTA: 8
@FastETC