A Rosalie Ronaldi solo le preocupa es su carrera. Sobrevive a base de martinis y comida basura, tira los zapatos bajo la mesa del comedor, cuelga sus sujetadores de la barra de la cortina del baño y deja tirada la ropa sobre sillas y sofás…Nick Romeo es la fantasía de cualquier mujer; alto, moreno, tremendamente guapo, rico, buen amante y lo mejor de todo: le gusta cocinar y es extremadamente pulcro. Posee tal sentido del orden y la limpieza que choca con el desastre que es ella en labores domésticas…Él dice que quiere una mujer independiente, pero cuando se topa con Rosalie, todo lo que quiere es cuidar de ella. ¿Cuál es el problema entonces? Pues un cambio de identidad, un robo ocultado cuando era menor de edad y una gran y curiosa familia italiana más que entrometida para su tranquilidad.
"-¡Hola, cariño! ¿Qué tal estás?Nick levantó el auricular.-Hola.-¿Nick?-Sí, ¿quién iba a ser si no?-¿Por qué has cogido el teléfono?-porque has llamado.-Llamaba a Dave-¿Has llamado para hablar con el perro?-Siempre lo hago. Le gusta.-Ya veo. Pensaba que llamabas para hablar conmigo.-Nunca te llamo «cariño». ¿Qué te ha hecho pensar que te llamaba a ti?"Además de los temas principales, la autora deja caer temas como la infidelidad consentida, la anorexia... Temas que sirven para reforzar el carácter de los personajes y que al mismo tiempo hacen que pensemos sobre ello.
Romeo, Romeo, es una historia divertida y entretenida para pasar una tarde, consigues abstraerte en la lectura de manera que cuesta mucho dejarla hasta llegar al final. Por mi parte estaré atenta a lo próximo de la autora, a ver si hay suerte y me divierto tanto como con Nick y Rosalie o Lee según se prefiera.