Un estudio elaborado por una Universidad mejicana, coordinado por el doctor Cesáreo Estrada Rodríguez llega a la conclusión de que el estar sometido a ruidos molestos influye en el rendimiento de escolares y trabajadores.
El estar expuesto a ruidos molestos de manera continuada produce baja atención en los alumnos y aumenta el nivel de stress, lo que incide negativamente en el rendimiento de los escolares.
El nivel de ruido no debe superar los 60 decibelios, ya que las explicaciones del profesor se suelen emitir a ese nivel sonoro, por lo que dejan de ser legibles para el alumnado, sin contar los efectos mencionados en el párrafo anterior.
El ruido también repercute en el entorno laboral, ya que los ruidos molestos afectan a la capacidad de atención y concentración de las personas, lo que incide en el modus operandi del trabajador.
Además esta comprobado que la exposición a altos niveles de ruido produce rápida pérdida auditiva. En relación con la salud, el ruido incide en nuestro que hacer fisiológico, por lo que es un medidor del nivel de estrés que podemos sufrir.