Al final del pueblo pasando la iglesia, encontraremos el cartel de comienzo de ruta. Seguiremos hacia Lamiña por un camino bien asfaltado.
A pocos metros del primer cartel, volveremos a encontrarnos una bifurcación donde podremos continuar la ruta de los Foramontanos o seguir recto nuestro camino a las cascadas. Nos mantendremos en la misma senda.
Podremos disfrutar de las tapias realizadas al margen de la pista piedra a piedra que separan cada terreno.
La ruta sigue por la pista principal, hasta encontrarnos con una puerta canadiense. En ese momento, abandonaremos la senda para girar a la derecha para sumergirnos en un hayedo. El desvió está marcado con un nuevo panel.
Seguiremos ascendiendo el cauce del arroyo hasta finalmente, llegar a la primera cascada. Marcada con un puente construido en madera.
Las aguas del arroyo invitaban a refrescarse con un baño.
Las cascadas, nos las encontremos una tras otra, por lo que no hay perdida.
Tras disfrutar de cada una de las cascadas que nos ofrece el lugar, avanzaremos ladera arriba hasta volver a la puerta canadiense, que encontramos antes de entrar al hayedo. El camino de vuelta, será el mismo que hemos recorrido para venir en dirección opuesta.
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Os dejo aquí el track de la ruta. Track, ruta Cascadas de Lamiña