Cambio de escenario, cambio de ambiente. Este año Guía Peñín ha apostado por un escenario y ambiente distintos. Nada que ver con los salones anteriores. Nada más entrar Victoria te recibe vestida como en los años 20. Al estilo del nuevo salón. Con música en directo para acompañar los vinos que estás catando. ¿Acierto o error?. Leí al día siguiente algún comentario en contra de este escenario. Sin embargo, a nosotras nos encantó poder disfrutar de un poco de música mientras íbamos de stand en stand. Me daban ganas de sentarme al lado y disfrutar de una copa de vino a ritmo de jazz.
Además al tener luz natural, podías comprobar el color de los vinos. Las mesas a la altura adecuada. Todo perfecto.
Somos amantes del vino de y la buena música
Cuando vi el escenario como lo habían planteado, estilo años 20, con música, escenario, el plano en cuestión de las bodegas, el cuaderno de cata… casi sentí pena de no haber ido vestida para la ocasión. No me hubiese importado haber llevado un tocado con la falda y los tacones típicos de entonces preparada para ponerme a bailar en cualquier momento.
Ya sabes que somos amantes de la buena música –en este blog lo puedes comprobar-, si no vamos a más eventos que aúnan vino y música es por falta de tiempo en nuestras agendas. Pero si repiten en noviembre escenario parecido ¡estaremos impacientes por ver ese más que recomendado Salón de 5 Estrellas!
Por lo que en este sentido, nos pareció un gran acierto el cambio de escenario y de imagen del Salón. Los mejores vinos con la mejor música.
Grandes vinos
El salón presentó los mejores vinos, de eso no tenemos duda. Y en cuanto vimos que por allí estaba Vega Sicilia, no dudamos en pasarnos y catar. Son grandes novedades, gran fama, gran calidad y buen marketing. Por algo son grandes.
Macan Clásico 2010. Con barricas francesas 70% usadas 30% nuevas. 95 puntos.
Color: rojo cereza con ribete fucsia de intensidad media-alta. En nariz tiene recuerdos a madera, tostados, almendra, especias y vainilla. Nariz fina. En boca es potente, picante, gustoso, suave. Postgusto largo y con tanino pulido. Lo tiene todo: especias con madera. Muy atlántico.
Valbuena 5º 2009. 95 puntos.
Es el más british, el más chic. En nariz me trae recuerdos de buen whisky, recuerdos a madera y tostados, vainilla. Nariz fina y más aterciopelada. En boca entra ligero es picante pero sabroso, untuoso. Buen tanino con toques dulces, con cuerpo y equilibrado. Redondo. Me recuerda a un fino.
Alión 2010 elaborado con barricas francesas. 95 puntos.
De color picota con ribete violáceo, en nariz lo noto más pobre pero más sutil. Balsámicos y vainilla. Lagrima coloreada. No consigo sacar mucho más de ella. En boca sin embargo, es untuoso, gustoso, menos ácido, más ligero pero bastante bueno. Bastante rico.
Pintia 2010. 94 puntos.
De color rojo picota, en nariz tiene recuerdos a pipas, vainilla. Nariz fina y tostada y aterciopelada con toques herbáceos en el fondo. En boca es picante (ácido), ligeramente untuoso, potente, muy equilibrado, sabrosos con buen tanino. Refrescante. A pesar de su potencia y picante no me molesta. Es un vino con cuerpo.
Cune son bien reconocidos sus vinos por su amplia gama, desde su clásico Crianza, que nunca falla a los vinos que en esta ocasión conocimos: la gama alta. De esos que se ven poco pero que merece la pena disfrutar siempre que se pueda.
Imperial 2005 (Gran Reserva). 13,5%vol. Clásico. 93 puntos.
De color rojo cereza con ribete fucsia. En nariz, como gran reserva, necesita tiempo para abrirse pero en unos minutos empezamos a descubrir una nariz fina y nada alcoholica con recuerdos a barrica, tostados, pastelería, untuoso y notas herbáceas
En boca es gustoso, con buen tanino, muy equilibrado. Final afrutado. ¡Tremendo!
Contino Viña del Olivo 2009. Recién salido de bodega. 14% vol. Poca producción: 2.600 botellas. Vino de vanguardia. 93 puntos.
De color rojo cereza, ribete fucsia. Este vino aun le queda algún tiempo en botella pues su añada anterior está aun en el mercado. En nariz el primer recuerdo que me asalta es a “tarta de queso” (americana) y notas herbaceas. Nariz fina y elegante. Recuerdos a tostados, terroir. Me sigue recordando a la tarta de queso, a hojaldre. Tiene buena nariz aunque le falta abrir.En boca es ligero, fresco, untuoso, dulcecito de postgusto largo y de tarta.
Son vinos que están buenos ahora y en unos años.
Después de la experiencia Verema, nos encontramos con nuestros viejos amigos de Oro Wines, vinos de Juan Gil, que tienen vinos de toda la península. En este caso, nos tocaba probar los buenos: los que tienen 93-94 puntos Peñín. Casi perfectos.
Atteca 2011. Garnacha con 12 meses de barrica. D.O. Calatayud. 93 puntos.
De color rojo rubí en nariz tiene recuerdos balsámicos, tostados y de terroir, en boca es ligero, fresco, gustoso, con buen tanino, equilibrado, con la madera muy bien ensamblada, acidito pero refrescante, no molesta.
Atteca Armas 2009. De cepas viejas con 18 meses de barrica. D.O. Calatayud. 93 puntos.
De color rojo cereza en nariz tiene recuerdos herbáceos, terroir, tostados, frutos secos, almendra, vainilla. en boca es fresco, picante, equilibrado, dulce, con buen tanino. Postgusto dulce y refrescante.
Clío 2010. D.O. Jumilla. 22 meses en barrica. 70% monastrell 30% cabernet sauvignon. 93 puntos.
En nariz huele a mora, caramelo, mermelada, zarzamora con un toque a vainilla y recuerdos herbáceos. En boca es fresco, equilibrado, untuoso, con buen tanino, gustoso. Delicioso. “Sabe a cerveza”. Cuando se abre… entras en otra dimensión.
Tridente Tempranillo 2010. 15 meses en barrica francesa. Nueva añada. Vino de la Tierra de Castilla y León. 93 puntos.
En nariz tiene recuerdos herbáceos, de terroir, balsámicos, tostado, vainilla, mora y frutos negros. En boca es ligero, suave, fresco, suave, untuoso, gustoso, con un rico toque de vainilla. Refrescante. Con buen tanino y ligera acidez que da paso al dulzor.
Rejón 2011. 5.000 botellas. 20 meses de barrica. Vino de la Tierra de Castilla y León. 95 puntos.
En nariz me huele a anis, vainilla. Nariz elegante: dulcecito, recuerdos a caramelo, regaliz, chuche, azúcar. En boca entra dulce, gustoso, untuoso. Exquisito.
Pequeños pero grandes
No hace mucho conocimos uno de estos vinos no muy conocidos, vinos de autor que rulan por restaurantes y vinotecas. En una de estas nos cruzamos con Orben. Lo recatamos para maravillarnos una vez más. Y probamos Malpuesto, compañero de aventuras. Nada desmerecedor de la puntuación obtenida (93 y 95 respectivamente).
Malpuesto 2011. D.O. Rioja. 95 puntos.
En nariz recuerdos a vainilla y frutal. Tostados, zarzamora. En boca es dulce, fresco, con toques de vainilla, equilibrado, gustoso, con buen tanino. Postgusto corto y refrescante. Rico.
Orben 2009. D.O. Rioja. 93 puntos.
En nariz tiene recuerdos a frutos negros y tostados de barrica. Nariz más elegante y contundente. En boca es perfecto. Equilibrado y muy bien ensamblado.
Hace no mucho escribimos sobre los vinos de Madrid. Reconocidos fuera de nuestras fronteras, pero los madrileños somos así de tontos (al estilo español) despreciando lo nuestro sin saber realmente la calidad que tienen nuestro productos. Pues en este salón también se encontraban los vinos de Benabeleva una bodega familiar de Madrid (labran con caballo) situada en San Martín de Valdeiglesias, a los pies del Cerro de Guisando. Dignos de mención, de probar, repetir y disfrutar.
Bernabeleva Arroyo de Tórtolas. 2011. Vinos de Madrid. Cepas de 80 años. 93 puntos.
Color rojo caramelo dracula ocuro. En nariz tiene más recuerdos varietales y a panadería que sus compis de bodega. Es picante en nariz. Su aroma recuerda a una “aspirina de limón”. En boca boca es ácido, ligero, suave, equilibrado.
Bernabeleva Viña Bonita 2011. Vinos de Madrid. 94 puntos. Cepas de 90 años.
En nariz recuerdos a pastelería, tostados, fresa y frutos rojos. En boca es acido, ligeramente amargo, picante, sabroso, equilibrado.
Cantocuerdas Moscatel de Grano Menudo. 2011. Vinos de Madrid. 94 puntos.
En nariz tiene los recuerdos típicos de la moscatel. Varietal y fresco. En boca es untuoso y equilibrado con un toque verde.
Bernabeleva Carril del Rey. 2011. Garnacha. Vinos de Madrid. 95 puntos.
En nariz recuerdos a tostados, caramelo de fresa. Buen color. En boca es acido, picante, muy rico, dulce, untuoso, gustoso.
Los vinos de Jimenez-Landi llamaron mi atención por su situación, la sierra de Gredos, D.O. Méntrida. Una zona y D.O. a la que estoy cogiendo especial cariño por la calidad de sus vinos. Catamos lo que había allí y el resultado nos encantó.
Bajondillo. Syrah. D.O. Méntrida. 500-600 mts altura.
En nariz recuerdos a tostados, almendras tostadas, balsámicas, fresa, caramelo, chuches. Buena nariz. Muy dulce. En bica es picante, suave, fresco, ligeramente acido, corto en el postgusto con buen tanino. ligero y fácil de beber.
Sotorrendero 2011. D.O. Méntrida 60% Syrah 40% Garnacha. Parcela a 750 mts.
En nariz tiene recuerdos a “kikos”, a snack salado tostasdo, huele a sal. Em noca es sauve, fresco, ligero, gustoso, mineral,acidillo. Postgusto tostado.
Jimenez-Landi Piélago 2011. D.O. Méntrida. 100% Garnacha. Vino de pueblo, de las mejores parcelas de San Real de Vicente. 94 puntos
Color fresa con una nariz peculiar, mezcla de fruta y tostados, balsámicos, mora chuche y caramelo. En boca es picante, untuoso, acido, equilibrado, corto pero gustoso, dulce.
Jimenez-Landi Ataulfos. 2011. 100% Garnacha.94 puntos.
Poco color pero muy transparente. Color asalmonado. en nariz recuerdos a fresa ácida, caramelo, flores secas, chuches. En boca es picante, fresco, equilibrado, acidillo, potente. Postgusto largo y ácido.
Por recomendación de un amigo, nos acercamos al stand de Godeval (D.O. Valdeorras) con unos blancos supremos, de cepas viejas, bien elaborados, equilibrados, redondos. Nuestra primera experiencia en Valdeorras no pudo ser mejor.
-Godeval. Cepas Vellas, 2012, D.O.Valdeorras. 93 puntos. (Laderas de terreno picado al sol). Blanco.
En nariz recuerdos a pastelería, manzana, plátano, terruño, salino. En boca es salino, fresco, equilibrado, como una cerveza, ligeramente amargo, refrescante. Con cuerpo.
Otros vinos Godeval presentes en el Salón:
Godeval Dionisios. 100% albariño. 2012.
De color amarillo paja, brillante y limpio. En nariz es salino, frutal, con recuerdos a melocotón, frutas de hueso, pastelería y flores blancas. En boca es suave, untuoso, fresco, redondo, fácil de beber. Para comer y compartir con amigos.
Veigadares.
En nariz recuerdos a manzana, frutas de hueso, amentolado, caramelo, balsámicos, fino y elegante. En boca es sabroso, untuoso, ligeramente amargo y muy equilibrado.
Cepas Vellas sobre lías. 2012.
En nariz recuerdos a mar, frutos de hueso, pastelería –pan tostado, en boca es untuoso, salino, suave, acido y refrescante.
La primera vez que conocimos los vinos canarios nos gustaron, dulcecitos, distintos con un toque original y muy rico. Expertos en vinos dulces y en sus tintos creando una marca distintiva.
Teneguía Malvasia Dulce 2006. Reserva 95. Puntos. D.O. La Palma
En nariz recuerdos a miel, caramelo, membrillo. Dulce de melocotón, melocotón en almíbar. En boca es dulce untuoso, equilibrado, muy gustoso. Sabe a hueso de fruta con una acidez que le hace refrescante. Salado. Muy rico con postgusto largo de pasas.
Teneguia Malavasía Dulce Estelar. 1996 Reserva.95 puntos. D.O. La Palma
En nariz recuerdos a plátano muy maduro con toques de miel, muy tostado. Caramelo toffee. En boca es ácido, picante, muy dulce, ligeramente amargo. Muy sabroso con un punto salino. Espectacular en boca.
Viejos conocidos
Acabamos con viejos conocidos, tanto para el que pasa a menudo por este blog como el que no, estas bodegas son conocidos y reconocidas. Nos despedimos a ritmo de jazz y cava, con un una copa del mejor alabriño.
Gramona Argent 2008 Brut Reserva. 100% Chardonnay. D.O. Cava
En nariz recuerdos a flores blancas, panadería, manzana verde, pan tostado. En boca es sabroso, fresco, gustoso, untuoso. Refrescante.
Dulce Mediterranea. Ideal para gambas, paella, quesos, foie.
Ramón Bilbao
Bodega Mar de Frades – Finca Valiñas. Crianza sobre lias. 2012. 100% albariño. D.O. Rias Baixas. 93 puntos.
Nueva añada de este impresionante blanco. Recuerdos a frutas de hueso y mar. En boca es picantillo, untuoso, suave. Delicioso.
Antes de irme, no olvido coger mi copa de Mirto 2008, no es la nueva añada pero no importa, sé que se cuida la elaboración en esta bodega. Miro alrededor y desearía poder quedarme un rato sentada observando cómo pasa el tiempo y la gente sin ser conscientes de que yo observo sus pasos. Todo lo observo, aprendo y luego lo aplico. Así es como siempre he trabajado, así es como trabajo.
Gracias una vez más a Guía Peñín y su labor. Gracias a ti por pasarte y pararte a leer hasta el final. Gracias por hacer que este blog cada día crezca un poco más.
¡Hasta la próxima!
PD: Si has asistido a este salón, por favor, ¡no dejes de comentarnos como fue tu experiencia!
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