Sandwichs de Tortuga
En la imagen podemos ver unos sándwiches en forma de tortuga. La forma de la hogaza ya nos sugiere la idea de usarlo para hacer una tortuguita y además del relleno que hayamos elegido, para completar la ilusión nos bastarán unas lonchas finas de pepino y unas bolitas de queso para hacer los ojos.
Sandwich El Principe Sapo
Disney ha hecho un película inspirada en este cuento: La princesa y el sapo. Sorprended a los peques con un bocadillo ‟de cuento de hadas” usando un pan redondo, como puede ser el pan de pita, y haciendo todos los detalles con verduras, lonchas de queso, olivas… todo lo que se os ocurra que os puede servir para convertir el bocadillo en un simpático sapito.
Sandwich de Conejo
Para que vuestro sándwich tenga forma de conejo necesitaréis pan de molde sin corteza y un cortante para galletas en forma de corazón grande. Cortáis 3 corazones de pan: dos os servirán para hacer el bocadillo con el relleno que más os guste y el tercero lo cortáis a la mitad para hacer las orejas. Cortáis el centro de las orejas y la trompa en una loncha de queso, con una oliva hacéis el hocico y con unas tiras de zanahoria los bigotes. Los ojos que veis en la imagen son de azúcar y se venden en las tiendas de repostería, pero también podéis hacerlos con queso crema y un trocito de oliva negra.
Sandwich de Payaso
El sándwich lo podéis hacer como más os guste, para el pelo usáis zanahoria rallada, el lazo es de calabacín o pepino, la nariz un tomatito, los ojos y la boca los recortáis en una loncha de queso y la sonrisa está dibujada con cebollino.
Sandwich de Nintendo
Si vuestros peques están enganchados a los vídeojuegos seguro que esta sándwich tan original les encanta. Eso sí, para comerlo, ¡habrá que cerrarlo!
Sandwich de Araña
Cortando una ventana en una de las rebanadas de pan ya tenemos listo el espacio por el que se asomará este bichito. Los ojos están hechos con queso y olivas, las patas con calabacín u otra verdura algo durita, como por ejemplo zanahorias o pimientos.
Lleva un poco de tiempo prepararlos, ¡pero la cara de felicidad de los niños cuando vean estos bocadillos tan especiales hace que el esfuerzo valga la pena!
En la próxima semana postearé el segundo volumen de sandwiches.