Abandono total.
Silencio total.
Dos semanas en las que otras cosas funcionan, pero la principal marcada en la agenda se desinfla.
Al límite de la desaparición del subsidio por desempleo, y aunque llevo intentándolo todos los meses anteriores, es en estas semanas cuando me llaman para algo. Entrevista, otra entrevista, un día de prueba, contratada. Media jornada que se ordena para aclarar la otra media jornada. Y sin embargo...En una medida desesperada, asumo el desafío que plantea el amigo Homominimus, nada menos que el reto de los 30 días de noviembre, en una variante de intensidad media, media-alta, en realidad altísima (vistas las cifras en 6 semanas): el compromiso de 3-5 páginas diarias, durante el mágico mes de noviembre, pase lo que pase y así se abra la tierra en dos.
Con la última semana de octubre (supuesta 7ª) de descanso.
Reset a martillazos.Volvemos a jugar. A hostias.