Sentada mi sombra en un banco
no para de pensar,
enfrente hay un árbol,
mi sombra le sopla,
las hojas cambian a un color otoñal,
mi oscura forma se levanta para irse
pero el árbol llorando le pregunta
¿por qué?
Mi sombra le responde:
“es la vida”.
Poema de mi libro Y si las sombras caminan cuando no las vemos...
Ilustración creada por Virginia Palomeque