Séptima victoria consecutiva en Oklahoma City (105-87)

Los Celtics consiguieron una amplia victoria en una visita que no todos los equipos han solucionado bien. Los Thunder son un equipo joven y repleto de talento que, en cualquier noche, pueden hacer saltar la banca. Pero los Celtics cumplieron con su guión de juego y eso fue suficiente para someter a un conjunto falto de experiencia y entereza, llegando a tener diferencias favorables de hasta 24 puntos. Siete jugadores verdes anotaron 10 o más puntos y eso fue demasiado para los Thunder.
Los verdes finalizan la primera fase de sus partidos fuera de casa con un parcial inmejorable. Kevin Garnett volvió a liderar la anotación con 23 puntos y 8 rebotes. Paul Pierce aportó 21 y 6 rebotes. Rajon Rondo se fue a los 15 y 6 asistencias. Perkins anotó 13 y 8 rebotes mientras que Ray Allen obtuvo 11. Eddie House encestó 11 y Rasheed Wallace 10. El porcentaje general de tiro fue de un 56,5% y el del triple se elevó al 52,9%, un número absolutamente estratosférico.
Kevin Durant sigue demostrando que es el crack de la nueva generación de la NBA. Ayer con sus 36 puntos anotados sobrepasó la barrera de los 4000 convirtiendose en el segundo jugador más joven en llegar a esta cifra en toda la historia de la NBA (LeBron James ostenta la marca de ser el primero en conseguirlo). Pero el resto del equipo, a pesar de ser muy talentoso, se estrelló con la firme defensa de los Celtics y sólo Russell Westbrook destacó con 15 tantos. Jeff Green estuvo muy fallón.
Los Celtics descansan ahora hasta el próximo martes cuando disputaran un nuevo partido, en casa, ante los Milwaukee Bucks del más que probable mejor rookie del año, Brandon Jennings.