Shintori

Hola de nuevo!
Esta semana he estado super liada con cosillas de la uni, curro, etc, pero ya estoy aquí de nuevo para recuperar el buen ritmo que llevaba :)
Antes de nada disculpadme los que sois bloggers (en concreto Charo y Fer) por no escribiros, pero no sé qué narices le pasa a mi ordenador que escribo un comentario y no lo envía! Otras veces lo he solucionado entrando desde el Explorer, pero ahora no va, así que hasta que no me arregle Tony el asunto, os tendréis que conformar con lo que os vaya dejando en Twitter, Facebook... Sorry!!! :(
Os cuento: como hacía mucho que no íbamos a un japonés y ya teníamos mono de sushi, esta semana hemos ido al Shintori, que está en la calle Ortega y Gasset 67 (metro de Lista L4, o Diego de León L4, 5 y 6).  No tienen web ni nada por el estilo, así que de momento os tenéis que conformar con estas líneas.
Lo primero que hay que decir es que es un buffet libre: pagas 18€ (creo que no varía el precio según día u hora, pero la bebida y el postre van aparte) y comes todo lo que quieras, con la diferencia de que te lo traen a la mesa según lo que vayas eligiendo de la carta.
Tienen muchísimo sushi y mogollón de variado, además de otros platos bastante chulos, así que os recomiendo probar un poco de todo, y en especial de lo que no conozcáis.
Tony y yo empezamos con un clásico: ensalada wakame (de algas, con pepino y cangrejo) y una sopa miso, que con este frío nunca viene mal ^^
Y luego ya fuimos directos al sushi: nigiris, makis, sashimi y california rolls.
Tengo que decir que la calidad del pescado fue excepcional. Había leído comentarios diciendo que si todo era precocinado, que si los cortes eran muy finos, que... Pero Tony y yo nos quedamos gratamente sorprendidos con lo bueno que estaba todo, a pesar de la sobria presentación.
Con el postre tuvimos nuestros más y nuestros menos (sí, no siempre elijo yo), pero al final nos decidimos por un flan de té verde que según Tony estaba muy, muy bueno (a mí no me gusta el té verde, así que no me gustó), y yo elegí daifuku, que estaba tremendamente bueno y el relleno de judía roja era sensacional.
Lo que menos me gustó fue la lentitud con la que nos sirvieron (aunque es un punto a favor para demostrar que la comida está recién hecha), que había mucho ruido, y que olvidaron nuestra reserva y nos querían sentar en un sótano que más bien parecía un almacén (menos mal que al final nos dieron una mesa normal, que si no nos vamos!).
Por lo demás, nada que destacar.
Valoración general: un 8.5, porque pocas veces se encuentra un sushi tan bueno y la carta "all you can eat" me pareció más que bien por 18€, pero deberían mejorar un poco el trato al cliente.
Con esto me despido de vosotros, y volveré la semana que viene ya actualizando dos veces como venía siendo costumbre. Un besito comilones!
Carolina.
P.D.FOTOS: la cena (madre mía... quá cabeza más enorme tengo! jaja!)