¡Si!... ¡No!, ... Por algún lado tiene que andar...

En mitad de un amplio prado deshojaba enérgicamente una pequeña margarita comunicando en voz alta ¡Sí!... ¡No!... ¡Sí!... ¡No!... ¡Sí!... ¡No!...

Le pregunté: ¿Que has preguntado? Mientras en mi mente me decía que debía ser algo muy importante, casi vital para que hubiese desencadenado semejante decapitación floral, había en el suelo por lo menos 30 corolas de margaritas yertas.

Y me respondió: llevo tanto rato arrancando los pétalos, florecilla tras florecilla, que he olvidado mi propósito, pero como en mi casa siempre me dicen que lo mejor es tener uno en la vida, lo he apuntado en un trozo de papel que guardo en un bolsillo de mi falda. Ufanó su mano en uno de sus dos bolsillos, no, allí solo había pétalos de margaritas que cayeron al sacarla, así que se dirigió al otro y extrajo un papel arrugado y entregándomelo pude leer... 

¿Es posible un mundo mejor? 

Tenía una sonrisa amplia y en sus ojos noté que se felicitaba por tan buena pregunta, de persona mayor, responsable y preocupada de dejar un mundo más humano a las generaciones posteriores. Y la respuesta estaba clara, seguro que se hallaba en aquellas margaritas, aunque el Sí se le había resistido hasta ese momento, tenía ante sus ojos toda una pradera para encontrarlo. 

Respiró con alegría mientras regresó el pedazo de papel a su lugar predestinado, supuse que era por si volvía a perderse de su propósito de vida y... suavemente arrancó la margarita 31 y... comenzó a combinar en alto...¡Sí!,... ¡No!... y con amargura le dejé con su elevado propósito.

P.D.: "¿Cómo parar a los que tienen tan buenos propósitos en la vida que solo desean el bien común por encima del común?"

{¡B U E N A_____S U E R T E!}
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