No importa cuanto hagas por los demás, siempre quieren más. Siempre quieren más atención, más ayuda, que te preocupes más, que les hagas más "la pelota". ¿Qué pasa cuando tu necesitas un poco de atención? Que pasan de ti hasta que se te pasa, ¿verdad? Siempre pasa lo mismo.
Eres quién siempre está allí, para lo bueno, para lo malo, para lo regular, para todo. Este cuento ya os lo sabéis, ¿ahora que viene? Sí, estáis en lo cierto, cuando a ti te pasa algo ya no existes. Pero no existes para nadie, hasta para quién creías que siempre existirías. Aquella persona que pensabas que nunca te decepcionaría.
Crees que esa persona va a estar ahí cuando la necesites pero resulta que no, ya no te necesita. Tú has estado ahí cuando esa persona te ha necesitado más, cuando estaba undida, cuando necesitaba alguien que simplemente hablara de cualquier cosa sin importar la hora, el día o que pasase, sin importar nada, sólo esa persona, porque te necesitaba. Pero resulta que cuando tu la necesitas para una tontería o para algo realmente importante, ya no está. Ha encontrado algo en su vida que hace que tu dejes de existir, o simplemente dejas de existir para esa persona. Normalmente te cambian por algo o alguien que, por lo que se ve, te iguala en todo lo que has pasado junto a esa persona.
Te sientes decepcionado. Te sientes mal, creyendo que son imaginaciones tuyas, que no está pasando de verdad. En realidad tu ves que esa persona se va alejando cada vez más, hasta que ya no habláis y casi ni os miráis, pero no lo quieres creer. Quizá estas mejor o quizá estas reviviendo cosas que hacia años que no revivías, pero esa persona ya no está contigo para ayudarte porque ya no le importa, no le has ayudado lo suficiente como para tu merecer que esa persona te ayude. Lo más seguro es que ya tenga otra persona a la que ir si le pasa algo y borra de su memoria cuantas veces la has ayudado o te has quedado horas y horas pensando como ayudarla, cuantas veces te has preocupado o cuantas veces te hubiese gustado hacer algo que sabías que le iba a gustar para animarla, no has podido y te has sentido peor de lo que estaba esa persona.
Siempre quieren más, que des más de ti y tu recibir menos. Aseguran que no son así, ven como sufres cuando otras personas te lo hacen y acaban haciéndolo también. ¿Cuantas veces más tiene que pasar? Te cansas, decides que ya no quieres saber nada de nadie y ¿que es lo que pasa? Tú eres la persona culpable de lo que te pase, según la visión de los demás. "Tú te lo has buscado". Estas cansado, acabas sintiéndote indiferente a lo que digan, "¿me lo he buscado? pues muchas gracias y hasta otra", no quieres confiar en nadie más. El circulo se repite una y otra vez.
Laura ¡Gracias por leerme y/o comentar!