El fuego. La redención de su espíritu ante el abandono y el vacío. Lo quiere llenar con fuego. Estoy sola para salvarlo, soy su único Mesías. El intenta morirse atravesado por la violenta llama. Extinguirse. Yo soy agua y tengo miedo pero tengo fuerza y lo someto. Lo mantengo en mi vaivén un rato más. Lo anclo a este presente de miserias donde está solo conmigo y yo soy fuerte pero tengo miedo.
El quiere la llama como última gloria. Yo quiero que vea el mar. Yo mar.