Tan extravagante y lunática que resulta dificultoso enmarcarla en un solo género
Siete Psicópatas no es solo un rejunte de muy buenos actores. Es una película diferente, una suerte de comedia negrísima con tintes de thriller socarrón. Posee la particularidad que nos ofrece en su modo de hacer cine el director de In Bruges, Martin Mcdonagh, en este caso con una historia original, la cual quizás al principio nos resulte algo confusa pero con el correr de los minutos vemos cómo cada pieza va incrustándose en su lugar, de modo que todo cierre y nos agrade aún más. Rarísima, excéntrica y bañada de humor negro, en la cinta encontramos escenas de tiroteos al mejor estilo Tarantino o Guy Ritchie y muertes o disparos que surgen de la nada misma, es decir, en un momento en el que no los esperamos. Si bien la catalogamos como comedia, no esperemos lanzarnos en carcajadas, dado que los gags, si bien son muy buenos, no buscan esa misión.
LO MEJOR: la rareza, el particular humor, las situaciones que se dan, la manera de narrar la historia, los recursos utilizados y el reparto. LO PEOR: pierde el hilo en ciertos momentos. Da la sensación de faltarle algo o no cerrar bien algunas escenas. PUNTAJE: 7,90