Sobre “Divorced from Reality” por Baskerville (1 de 2)

Publicado el 13 diciembre 2009 por Vidal
En la edición correspondiente a enero/febrero del 2009 de la revista cristiana Touchstone, Stephen Baskerville publicó el artículo “Divorced from Reality” (“Divorciado de la realidad”) (http://www.touchstonemag.com/archives/article.php?id=22-01-019-f), sobre la crisis familiar en Estados Unidos. Me gustaría resumir su contenido, pero recomiendo encarecidamente a mis lectores que lean el texto completo, debido a la extensión y la profundidad del análisis de Baskersville sobre los asuntos discutidos.
De acuerdo al autor, el declive de la estructura familiar ha alcanzado proporciones peligorsas, y es la mayor fuente inestabilidad social en el mundo occidental, y una amenaza mayor a las libertades civicas y al gobierno constitucional. Citando a G. K. Chesterton, él sostiene que la estructura familiar sirve como el principal punto de cotejo del poder gubernamental, y que hoy la familia y el estado se confrontan el uno al otro como el factor de organización social primario. Él cree que las leyes de divorcio actuales son usadas por el estado para erosionar la primacía de la familia, y para aumentar su poder como control social. Él escribe:
“De hecho, muchos quedan devastados al descubrir que pueden ser forzados al divorcio por procedimientos enteramente fuera de su control. El divorcio autoriza una intrusión sin precedentes de gobierno en la vida familiar, incluyendo el poder de separar familias, tomar los niños, saquear los bienes de la familia, y encarcelar a los padres sin juicio. Compuesto de las cortes de familia y una vasta burocracia de servicios sociales subvencionada por el estado que tiene lo que equivaldría a poderes policiacos, la maquinaria del divorcio se ha convertido en el sector más predatorio y represivo del gobierno jamás creado en los Estados Unidos y es hoy la más grande amenaza a las libertades constitucionales.”
La mayor preocupación de Baskerville son las leyes regulando “el divorcio sin falta” (por ej. el divorcio or consentimiento mutuo). Cuando hace cuatro décadas se pasaron leyes para legalizar este tipo de divorcio, estas leyes le permitieron al gobierno, a petición de uno los cónyuges, disolver un matrimonio en contra de las objeciones del otror. Hoy el divorcio, él afirma, rara vez involucra a dos personas decidiendo separarse mutuamente, sino que son unilaterales en naturaleza, prevaleciendo sobre las objeciones de uno de los cónyuges. Él escribe:
“Bajo el divorcio “sin-falta,” al que algunos llaman “unilateral,”—un regimen legal que elimina toda consideración de justicia de los procedimientos—el divorcio se convierte en una súbita toma de poder por uno de los cónyuges, asistido por un ejército of judicial parásitos que recompensan la beligerancia y se benefician de asegurar la litigación: jueces, abogados, psicoterapistas, consejeros, mediadores, evaluadores de custody, trabajadores sociales, y más.”
El divorcio unilateral genera problemas politicos y costitucionales por su misma naturaleza, requiere constante supervisión gobierno sobre la vida familiar. El divorcio expande el poder del gobierno porque involucra funcionarios de l estado para ejecutar el divorcio y la órden post-divorcio.
Las implicaciones del divorcio unilateral son terribles: le permite al gobierno remover gente inocente (usualmente al padre) de sus hogares, tomar sus propiedades, y separarlos de sus hijos, aún si son inocentes de crimen alguno. El estado toma control de sus hijos sin la obligación de tener que probar por qué; la obligación de mostrar pruebas (y la obligación financiera requerida para hacerlo) recae en él. Baskerville escribe:
“Por mucho las más serias consecuencias involucran a los hijos, quienes se han convertido en el arma principal de la maquinaria del divorcio. Invariablemente la primera acción de la corte de divircios, una vez que el divorcio ha sido solicitado, es separar a los hijos de uno de sus padres, usualmente del padre. Hasta que esto ocurre, nadie en la maquineria adquiere ni poder ni ganancias. El primer principio y la primera acción de la corte de divorcio es entonces: Remover al padre.”
La maquinaria del divorcio puede tomar a cualquier padre respetable, impedirle ver sus propios hijos sin autorización del gobierno, arrestarlo si falla en obedecer la variedad of directivas judiciales adicionales que le aplican solo a él; arrestarlo por violencia doméstica o abuso infantil, aún si no se presenta evidencia de que él ha cometido tales; arrestarlo por no pagar pensión alimenticiat, aún si la cantidad excede sus medios; él puede ser arrestado aún por no pagarle a un abogado o a un sicotherapista que él no ha contratado.
El crecimiento de la maquinaria del divorcio ha generado una serie de hysterias en contra de los padres tan horribles que nadie se atreve a defender a quiens han sido acusados: maltrato infantil, abuso sexual, golpear a la esposa, y no pagar pensión alimenticia. El acusado de estas ofensas, aún en la ausence de cualquier cargo formal, evidencia, o convicción, pierde a sus hijos y es aislado de todos, ya que nadie quiere estar asociado con un “pedófilo”, “abusador”, o “padre irresponsable”.
Y mientras todo esto sucede, no hay evidencia de que la crisis familiar esté causada significativamente por padres que abandona a sus familias, le pegan a sus esposas, y abusan de sus hijos, sino que hay evidencia irrefutable que indica que esta crisis “es causada casi por entero por las cortes de divorcio al forzar a los padres a separarse de sus hijos y de usar estas falsas acusaciones como racionalización.”