Adoro viajar y sacar muchas fotografías, pero también he aprendido a sostener la mirada por buen rato y disfrutar lo que tengo adelante, la naturaleza, el paisaje, los sonidos, los colores, los aromas...
Esos minutos te los tomás y creeme te llenan no solo la cabeza sino el corazón: de recuerdos y sentimientos. La sensación es inigualable, intentalo y hasta el cuerpo te lo agradecerá. Es aprender a mirar, no solo pasar...
#AnimateAMirar