Dos jovenzanas hablaban sobre maquillajes y la cosa fue tal que así:
- Tía, me he comprado una paleta del color.
- Pero paleta de shadows?
- Sí sí, en el Primor, súper barata.
- Ah sí, yo también la tengo...pero le voy a decir a la Paula que me enseñe a maquillarme porque es que resulta que yo me doy los puntos de luz, pero no sé si lo hago bien.
- Es que es importante usar bien el iluminador...
- Claro, por eso...y el contouring, que nos enseñe el contouring.
Mi cuñada y yo nos mirábamos como si viniéramos del pleistoceno por lo menos.
Porque ahora se lleva que si el liner, que si el khöl, (la raya del ojo de toda la vida vamos, eso sí a gusto de cada una, y si te gusta muy gruesa cuidadín que puedes parecer al cantante de The Cure), que si el blush (lo que viene siendo el colorete), que si las shadows, a las que ya cantaba Mecano en los años 90...
"Sombra aquí, sombra allá, maquíllate, maquíllate...un espejo de cristal y mírate, y mírate...."
Pues esas mismo.