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Claramente, con nombres y apellidos. Los rostros del cambio en Avilés. El momento de despertar de un sueño sin tiempo en el que estábamos todos sumidos. El momento de echar a andar por nosotros mismos sin permitir que otros continúen haciendo y deshaciendo a su antojo, a nuestras espaldas, cubiertos por el manto del secretismo.
Es hora ya de abrir el ayuntamiento de par en par y vigilar que así permanezca. Sustituir a mendaces burócratas por gente del pueblo, que trabajaran con toda la ilusión y poniendo todas sus energías por ese mismo pueblo, pues todos somos Avilés. Eso es lo que Somos, personas que a título personal nos hemos unido en un proyecto común, una agrupación de electores que más allá de siglas y partidos pretendemos construir una ciudad verdaderamente habitable desde un ayuntamiento de todos, con todos, y para todos. Nadie mejor que las propias gentes de Avilés para gestionar el ayuntamiento. No nos faltan capacidades ni voluntad.
Tras mucho tiempo de ser ignorados por las instituciones locales de tal forma que seguro que más de uno dudó de su propia existencia y cansados de esperar un prometido mejor mañana que no llegaba, dimos el paso, un paso necesario.
Un conocido me preguntó si me había vuelto loco (o más loco según las malas lenguas) al saber que había dado el paso. Al contrario, me he vuelto cuerdo. Es un acto de cordura en un loco mundo el tomar parte activa cuando todo a tu alrededor amenaza derrumbe, no deseo un mundo en ruinas. Permanecer impasible es lo verdaderamente peligroso, un peligro que puede llegar a ser letal. Eso si es un acto de completa locura.
Como decía el general Leclerc: "No obedezco órdenes idiotas". Una cita que me viene a la mente de cuando en cuando, especialmente cuando oigo la recurrente frase "Es lo que hay". Es lo que hay? Habráse visto tamaño despropósito verbalizado, como si las cosas y las circunstancias que a todos afectan nacieran solas como por arte de magia. Pues no, majos, alguien las orquestó y las llevó a término, de modo que este es lo que hay es falso, pues puede haber todo lo que estemos dispuestos a crear. No lo asumo, sabiendo que tenemos en nuestra mano la posibilidad de construir un mundo de otro modo, con un mejor funcionamiento, más equitativo y justo, menos sórdido que el que recorremos a diario. Al igual que imagino que todos los demás que en Somos dieron el paso, no lo acato, si no que trato de contribuir a crear algo nuevo, algo mejor para todos que lo hasta ahora visto, este engranaje ya caduco que sobradamente conocemos.
En los últimos tiempos han pasado muchas cosas, hemos visto nacer y crecer el 15 M, hemos visto arder calles en Grecia, y disturbios en Hamburgo, entre otras muchas. Muchas cosas que nos dan una oportunidad y una lección. Que la política es cosa de todos, ya que nos afecta en nuestro vivir cada día, y todos nos tenemos que meter en ello, ya habéis visto lo que sucede cuando se deja en manos de unos pocos.
Pero no nos contentemos en ir a votar cada vez que haya elecciones. Estemos pendientes de esos asuntos, intervengamos, démonos cuenta de en cuantos aspectos de nuestras propias vidas influye la política, así que no quedemos fuera, al margen, no caigamos en la apatía y la indiferencia, es algo de mucho interés para todos nosotros. Todos podemos aprender y aportar algo. Somos más hábiles de lo que creemos. Hagámoslo.
De modo que avilesinos y avilesinas, pero también todos los habitantes de cualquier población que leáis esto, ya hemos tenido más que suficiente paciencia, así que no sigamos siendo espectadores, tomemos un papel protagonista en nuestras propias vidas desde ya.