Hoy tuve un sueño del que pude recordar dos de las partes importantes. Una de ellas es que yo entraba a un comercio donde había varias chucherías sobre una mesa: libretas y cuadernos pequeños y baratos, de los que tienen pastas y hojas muy delgados, de mala calidad.
Tomé una libreta para verla. Estaba ahí perdiendo el tiempo, huyendo de una circunstancia incómoda. En la primera hoja había cosas que yo había escrito. También en la última hoja. Luego la libreta era una recopilación de varios cuadernos que fui dejando por el camino. Traté de comprarla. La empleada dijo que el objeto no estaba en venta, que era de su novio. Estaba por explicarle cuando desperté.
Lo que me llama la atención es la sensación de que realmente leí cosas que escribí hace mucho tiempo, de las que ya no me acordaba.
Silvia Parque