Revista Literatura
El amor es todo lo contrario a la pasividad, a la monotonía, al tedio y la desgana. A sobrevivir. A dejar transcurrir las horas y los días. A la pereza. Al "ya vendrán mejores tiempos". Al "más vale malo conocido que bueno por conocer". A la hipocresía. Al paralelismo. A la doble moral. A lo antiguo y a lo espeso. Al rencor. A las apariencias. El amor es, exactamente, eso que describe Lope de Vega en el siguiente Soneto. Si lo habéis probado, lo sabréis...
Desmayarse, atreverse, estar furioso,
áspero, tierno, liberal, esquivo,
alentado, mortal, difunto, vivo,
leal, traidor, cobarde y animoso;
no hallar fuera del bien centro y reposo,
mostrarse alegre, triste, humilde, altivo,
enojado, valiente, fugitivo,
satisfecho, ofendido, receloso;
huir el rostro al claro desengaño,
beber veneno por licor suave,
olvidar el provecho, amar el daño;
creer que un cielo en un infierno cabe,
dar la vida y el alma a un desengaño;
esto es amor, quien lo probó lo sabe.