La intención principal de Stephen Stills tras abandonar Crossby, Stills, Nash & Young, era crear un supergrupo de country rock que se basara en todos y cada uno de los aspectos de la música tradicional americana. En 1971, logró su objetivo y bautizó a la banda como “Manassas”. Exploraron magistralmente un amplio territorio sónico que comprende desde estilos como country, folk, latin jazz o rock, hasta llegar a la exquisitez del blues, bluegrass o el blues rock.
Y el resultado que obtuvieron fue sencillamente genial, dando lugar a uno de los álbumes dobles más importantes de la década de los setenta y de toda la historia del rock. Desde una humilde opinión, “Manassas”, resulta esencial para comprender la música americana de los 70.
Para la realización de este disco homónimo, Stephen Stills contó con la valiosa colaboración de músicos de la talla de Chris Hillman, un gran compositor, ex integrante de los Byrds y también miembro fundador de The Flying Burrito Brothers, Al Perkins componente de The Flying Burrito Brothers, a la voz y guitarras, Calvin “Fuzzy” Samuels (bajo), Paul Harris (piano), Joe Lala (percusión y voz) y Dallas Taylor (batería). Una mención especial merece el personal adicional, capitaneado por el Stone Bill Wyman (bajo), Sydney George (armónica), Jerry Aiello (piano, órgano), Roger Bush (bajo acústico) y Byron Berline (violín).
Una inolvidable selección de músicos, entre los que se encontraba el excelente violinista de bluegrass Byron Berline, que grabó con artistas del nivel de Bob Dylan, The Rolling Stones, The Doobie Brothers, The Band o los Byrds.
Centrándonos en el disco, grabado en los “Criteria Sound Studios” de Miami, se publicó en abril de 1972 por el sello Atlantic Records. Fue producido por el propio Stephen Stills, Chris Hillman y Dallas Taylor. En su edición original consta de 21 temas divididos en cuatro partes, que abarcan diferentes géneros como el country, folk, blues o rock, correspondiéndose cada una con las cuatro caras de los vinilos.
Con la segunda parte “The Wilderness”,vnos transportan a un maravilloso viaje al viejo oeste, gracias al country / bluegrass mostrado en “Fallen Eagle” (fantástico y pegadizo su impecable violín) y unas joyas de incalculable valor: “Jesus Gave Love Away For Free”, un genuino country rock “Colorado”y un antológico “So Begins The Task”.
La tercera parte, “Consider”, rodeada en su totalidad de folk y folk rock, destacaremos el memorable hit “It Doesn’t Matter”, Johnny’s Garden, “How Far”, “Move Around”, y “The Love Gangster” (canción en la que toca Bill Wyman, el bajista de los Stones).
La cuarta parte, denominada “Rock & Roll Is Here To Stay”, está impregnada de un genial blues rock, conteniendo cortes de una gran calidad como “The Treasure”, absolutamente épicos sus ocho minutos de duración, “Right Now”, “What To Do” o el espléndido acústico “Blues Man”, que cierra el álbum y en dónde Stephen Stills nos demuestra el porqué de su grandeza. Este último tema, fue dedicado a la memoria de los tristemente fallecidos guitarristas Jimi Hendrix, Duane Allman y Al Wilson.
Su curiosa fotografía de portada, en la que podemos visualizar a la banda de pie, bajo el cartel de una estación de ferrocarril, fue tomada en la localidad estadounidense de Manassas (Virginia). Y así finalizaba el recorrido de Manassas por la música y cultura popular americana, obsequiándonos con una obra perfecta de principio a fin, situándose como una referencia inexcusable de la época dorada del rock.
Posteriormente, esta formación estadounidense anunciaba su disolución definitiva en 1973, por diversos problemas relacionados con la publicación de su segundo LP “Down The Road”. Quizás tuvieron una carrera corta, pero lo suficientemente intensa como para dejarnos un álbum que sigue y seguirá, brillando con luz propia en el centro de este universo infinito al que llaman rock and roll.