Sueña, de Lisa McMann

♣Título: Wake (Dream Catcher #1)
♣ Autor: Lisa McMann
♣Traductor: Francesc Esparza
♣Género: Fantasía, Romance
♣Editorial: Everest
♣ Número de páginas: 224
♣ ISBN: 978-84-441-4625-6
Para Janie, a sus diecisiete años, verse arrastrada a los sueños de otras personas ha dejado de ser una novedad hace tiempo. No puede decirle a nadie lo que hace porque, o jamás la creerían o, peor aún, la considerarían una tarada. Janie, por consiguiente, vive en el límite, bajo la maldición de una capacidad que no ha pedido y que no puede controlar. Se precipita entonces en una espantosa pesadilla. Por primera vez, Janie es algo más que un testigo de una retorcida psique ajena: Ahora toma parte…
Sueña fue el debut de esta autora norteamericana, catalogada por el NYT como una autora best seller. A España llegó con gran atraso, teniendo en cuenta que salió en el año 2008 y pudimos disfrutar de él en el 2010 (sólo unos cuantos afortunados, ya que su edición se llevó a cabo por el Círculo de Lectores). Sin embargo, un poco más tarde, Everest destapaba su gran sorpresa: ¡publicarían la trilogía de La Cazadora de Sueños, de Lisa McMann! Fue una noticia ovacionada por los lectores de todo el país. Y entre ellos, estaba yo, con ganas de disfrutar de esta novela de la que se habían dicho tantas cosas y que tenía un cierto embrujo, muy difícil de explicar. Ahora ya lo he descubierto todo y, aunque no es oro todo lo que reluce, aquí os traigo mis impresiones:

Todo empieza con Janie Hannagan deslizándose en su silla del insti, mientras se sumerge en un sueño ajeno. No os sorprendáis, ella no lo hace porque ya está más que acostumbrada. En aquel sueño, un chico pasea desnudo por el campo del instituto. Se trata de Luke Drake, un jugador muy presuntuoso que nunca ha reparado en ella. Sin embargo, cuando él se percata de que ella está sentada en las gradas, no duda en pedirle ayuda. Pero ella no sabe dársela. El sueño se acaba, pero empieza un retroceso en la memoria de Janie, donde seremos testigos de otras abducciones por las que ha tenido que pasar desde que es pequeña, acostumbrándose a no tener sueños propios y sí a ser una visitante no deseada en los sueños ajenos. En ese retroceso conocemos a Carrie Brandt, la que será la mejor amiga de Janie, y también conocemos a Melisa, la pija insulsa y estúpida que se mete siempre con la pobre Janie, quien no tiene culpa de no tener un centavo de más y de vivir con su madre alcohólica en una casa de un barrio de mala muerte. Ellas no entienden, ni entenderán, lo que le ocurre. Nadie lo sabe, nadie sabe lo que tiene que pasar todos los días ni lo que supone estar condenada a vivir sola por el resto de su vida. ¿Cómo podrá compartir cama con alguien si cuando está cerca de una persona dormida, se ve sumergida en sus sueños o tal vez… sus pesadillas? No, ella no tiene futuro, está encarcelada en su propia vida y lo tiene superado, en serio. Lo único que quiere es ir a trabajar después de clase a la residencia de ancianos y poder ahorrar para ir a una buena universidad. Ni siquiera se preocupará por Cabel, ese chico que la atrae de manera irremediable y que guarda un oscuro secreto. Lo que sí la distraerá de su principal cometido, será esa horrible pesadilla que la asaltó una noche en el coche, de vuela a casa, y que le presentó a un monstruo atormentado, con el rostro quemado y cuchillas en los dedos.

La historia comienza muy bien, engancha y te interesas por lo que está ocurriendo. Necesitas saber qué es lo que va a pasar y por qué le ocurre todo esto a la protagonista. La novela tiene un argumento muy interesante y original; el mundo de los sueños siempre ha sido algo misterioso y lúgubre, la autora crea un aura espectral en cada sueño, como si el tiempo fuera más lento y los sonidos se escucharan con eco y, por supuesto, todo el color desapareciera y se convirtieran en figuras de fimo, horneadas y despersonalizadas. Las referencias culturales también son muy divertidas, por ejemplo, la evidente inspiración en Freddy Krueger para transformar al monstruo de cuchillas en los dedos, o algunas menciones a películas y libros (Globe y Náufrago) y, cogiéndome de sorpresa, Lisa McMann introduce en su novela de adolescente un personaje LGTB (más concretamente, una chica lesbiana) y hace alusiones a escenas de sexo lésbico y sueños eróticos con el mismo tema. Me parece fantástico y sano y la aplaudo con total sinceridad porque, en España concretamente, necesitamos más referencias como estas, naturales y sin tapujos, para que la realidad LGTB sea una realidad normal y natural. Tengo la esperanza de que, en la adaptación cinematográfica, respeten estos puntos; sorprendentemente, creo que esta novela ganará mucho en el cine, ya que se trata de una historia muy gráfica y que, como película, será seguramente un éxito.

Sin embargo, el estilo narrativo de la autora es un gran talón de Aquiles en esta novela. Su narración es casi de colegio, no escribe, desde mi punto de vista, de una manera correcta para la edad que tiene y menos para una novela dirigida a adolescentes. Más bien parece un guión de cine o teatro (hasta hay una parte del libro que juega con ese género) y yo no estaba preparado para encontrarme con un estilo tan maltrecho. No hay descripciones, y tampoco permite que los personajes se desarrollen de manera correcta; los diálogos no son profundos y más bien todo queda explicado de manera superficial. Sobre todo el romance entre los protagonistas, que nace sin forma ni explicación, sólo porque tenía que estar, como si fuera una obligación para la autora introducirlo. Por otro lado, algunos pasajes de la novela son inconsistentes e inverosímiles (todo lo que incluye a la Comisario Komisky lo es). Si yo hubiera sido editor, lo habría mandado a reescribir, porque la historia se merecía más chicha y una buena pulida de estilo.

Sueña, de Lisa Mcmann, es un libro que atraerá a muchísimos jóvenes hacia sus páginas, y más de uno se sorprenderá a sí mismo enganchado a la historia original que la autora ha trazado para nosotros. No obstante, es cierto que todavía le falta muchísimo a este primer tomo de la trilogía y que, gracias a un final muy interesante y que te deja con las ganas de continuar, yo todavía guardo la esperanza de que el segundo tomo esté muchísimo mejor llevado y narrado, explotando los puntos fuertes de un argumento y unos personajes que darían mucho de sí en otras circunstancias. Lo recomendaría a los más fanáticos de las historias de amor juvenil paranormal; tanto el libro como la película, a vosotros no os decepcionará. A los demás (donde me incluyo), eso ya es otro asunto.

Los sueños vuelven a ser el centro de nuestra vida en Sueña, de Lisa McMann. Nunca nuestras propias pesadillas fueron tan terroríficas.

Lisa MacMann goza de una merecida reputación entre los autores best seller del New York Times; habiendo sido galardonada con varios premios y reconocimientos de sus obras. En concreto, en 2008 la American Library Association (ALA) le concedió el premio al Mejor libro para jóvenes adultos por el primer título que da comienzo a esta trilogía: Sueña.