Supervivientes - Intimidad

Publicado el 21 enero 2010 por Onomatopeyistas

— ¿Puedo hacerme un refugio? Me gustaría tener un poco de intimidad.
— Tú verás.
— ¿Eso qué quiere decir? ¿Que sí?
— Eso quiere decir que allá tú. Ya eres mayorcito.
— ¿Me estás amenazando?
— ¿Qué? Sólo te he dicho que tú verás lo que haces.
— Pero es un "tú verás" de "atente a las consecuencias".
— No, es un "tú verás" de "haz lo que te dé la gana".
— ¿Pero te molestaría que lo hiciera?
— No.
— ¿De verdad?
— Sí.
— ¿Sí que sí te molestaría o sí que lo dices de verdad?
— Sí que si eso es lo que quieres hacer… adelante.
— No, pero ya no lo estás diciendo de corazón, ahora lo estás diciendo por obligación. Tú no quieres que me vaya.
— No me importa si te vas. Yo tendría más espacio para mí si lo haces.
— Eso lo dices para hacerte el tipo duro. En el fondo quieres estar conmigo y me necesitas.
— No.
— Dices que no para no admitirlo, pero te tengo calado. Te sentirías muy solo sin mí.
— Para nada, encontraría mil formas de distracción.
— No seas así, reconoce que no quieres que me vaya y ya está.
— ¿Quieres que haga eso?
— Es la verdad.
— No, no es la verdad. Vete. Por favor.
— No quiero irme. No quiero irme porque tú lo digas. Los dos tenemos que estar de acuerdo. No quiero irme por obligación.
— Te lo estoy diciendo de corazón. Por favor, vete. Sé que es lo que necesitas hacer.
— No, no quiero irme. Simplemente lo estaba proponiendo.
— ¿Qué? Ni siquiera tú sabes lo que quieres hacer
— Yo no tengo la culpa de eso
— Sí que la tienes. Has sido tú el que ha empezado esta conversación. ¿O no?
— ¡No lo sé!
— Eres una montaña rusa…
— Y tú un estúpido.
— Anda, mira a ver si con esto prende.
— Voy.
— Sopla.
— Ya está.
Imagen: Jorge Custodio