Este llanto desmigajándose,
estás gotas desmanteladas
como huevos desperdiciados
y el dolor pujando tu nombre.
Como me hace de falta tu sonrisa
sonando contra mi soledad,
hace días que perdí todo rastro de vos
y nada me dicen los girasoles puestos al sol
como brújulas desamparadas.
Tengo roto todo,
adentro se me descosió el monicongo
y me haces falta…
regresa
el viento anda de suicida entre mis días
y mi culpa de tu ausencia
me acorrala…
me acorrala.
Dios
cuanto te extraño,
como hace de falta tu voz pariendo,
tu compañía de desvelos creciendo.
Grito el mundo
e impongo a la noche tu geografía,
todo se derrumba;
los colores se desbandan
llevándose cada migaja de ti.
Ya ves
estoy partido como un leño
y la ceniza de un rayo no me alivia
para volverme llama en chimenea.
He desertado a los rituales
y aruño manicomios en venganza.
todos los rostros tienen una cicatriz tuya
y se me sale por los ojos
este corazón destrozado.
Tu ausenciaestá asesinando
por favor
lanza un títere de alegría a mis ojos
vuelve con tus maderas y crayones
aplástame como una ola
hasta que mi vejez te persiga de nuevo
con su bastón en alto blasfemando el café de las mañanas.
Regresa y da paz a mi corazón perdido.
Ya ves
después de todo
tu ausencia pudo más que mi locura.
Se me sale un llanto,
casi todo.