En temas tecnológicos en los que el "business case" está claro y hay mega empresas de por medio, siempre se lía parda cuando alguien intenta hacer algo innovador.
Viladecans, la ciudad en la que vivo, inició hace unos años un gran proyecto de infraestructuras para llevar la línea de alta velocidad a nuestros hogares. De esta manera, conseguiríamos ponernos, en este sentido, al mismo nivel que la mismísima Corea del Sur, la Fórmula uno de internet.
Para ello, y hasta dónde yo sé, el ayuntamiento inició las obras de infraestructura y alquiló después estas a dos operadoras de telefonía.
Hubo una, Telefónica, que al parecer no ha entrado en la fiesta, y yo desconozco el motivo. La realidad es que, dentro de la prepotencia que suelen llevar estas empresas, vio que ahí podía perder pasta, y se tiró a la yugular del ayuntamiento. Han pasado un largo tiempo, como viene siendo habitual en estos temas, y finalmente la CMT ha emitido un veredicto (Enlace a la noticia).
Y yo, ante estas grandes batallas, tengo por qué alegrarme. Fui uno de los afortunados que pudo acceder al "piloto" de esta nueva infraestructura. He pasado de un máximo de 6MB (aunque tuviera contratados 20) a disponer de 100MB de bajada y 100MB de subida (lo máximo que he conseguido han sido 96/64, pero tócate los pies). Encima estoy pagando más o menos lo mismo que ya pagaba en mi proveedor anterior.
Ahora van a revisar los precios que Viladecans cobra a las operadoras y todo parece indicar que tiene que subirles el precio un 14%. No tengo muy claro si me lo repercutirán o no, pero lo que debo decir es que me alegro que mi ciudad haya ganado la partida a este gigante que sigue robándonos día tras día con el roaming, los datos y cualquier servicio que nos de. Europa está llamando a esta empresa y al resto que operan en nuestro país, para que revisen sus precios a la baja para dar mejores servicios a un precio más justo, pero siguen sin hacerlo.
Desde aquí un aplauso al consistorio de Viladecans por la victoria conseguida. Ahora, a seguir!!!
Que vaya bonito,