
Definitivamente una puerta se cierra, una puerta grande y pesada que me ha desafiado, que me ha llevado un poco al límite, que me ha hecho sufrir pero también que me ha hecho aprender y sentirme querido, igualmente siento que por el momento mi trabajo en España ha terminado, siento la necesidad de buscar nuevos desafíos, seguir aprendiendo, poder ser mejor, dejar de ser uno mas, tratar de dar respuesta a la frustración que tengo determinados días donde siento que no estoy haciendo lo suficiente, no estoy dando mi mejor versión, no estoy siendo el mejor... aunque se que nunca llueve a gusto de todos, que no puedes agradarle a todo el mundo, que hasta los mayores expertos tienen críticos, aun a sabiendas de todo eso lo tolero bastante mal, no lo trago, quiero ser mejor, quiero hacer las cosas mejor, aunque muchas veces no dependa de mi, aunque se perfectamente que no puedo curar a todo el mundo, simplemente el envejecimiento, la vida, hace que haya cosas que están fuera de nuestro control curar o dar respuesta a todas y cada una de las necesidades de mis pacientes ... y aun así siento frustración, a pesar de hacer todo lo que esta en mi mano siento frustración por no poder dar alivio a las personas que depositan su confianza en mi y en mis habilidades.
Es por ellos, por todos esos pacientes que siento que puedo ayudar, que puedo lograr que su vida sea mejor a medio y largo plazo, es por ellos por los que me tengo que marchar, como he dicho es complicado cerrar una puerta, dejar de ver a pacientes, que no en vano son pacientes, pero con los cuales llegas a tener una relación mucho mas cercana que meramente profesional- paciente tras 5 años, siento pena dejar muchas caras atrás, siento miedo de irme a otro país, cultura, idioma, lejos de mi familia y amigos, y al mismo tiempo me siento extremadamente motivado por ver que me voy a encontrar, que puedo dar de mi, que puedo aportar, que inspiración, motivación, fortalezas y desafíos me traerá esta nueva aventura.
Como he dicho muchas veces, estar en un entorno de confianza nunca ha sido lo mío, llevo una buena temporada sintiendo que avanzo pero al mismo tiempo estoy estancado en el mismo punto, se que dejo muchas cosas atrás, pero necesito volver a sentir la adrenalina, el peligro, la soledad, no es ni mucho menos el desafío mas duro de mi vida, pero sin lugar a dudas será difícil, pero me muero de ganas de que sea difícil... si quiero ser mejor para mi y para los que me rodean, entonces debo de rodearme de lo mejor y si eso implica tomar riesgos y sacrificios en todos los niveles y habrá que tomarlos sin miedo.
Si no arriesgas no ganas, solo se puede ganar jugando y solo entiendo el juego si es al límite del riesgo.