Me cansé de los hipócritas, de los de la boquita para afuera, de los que quieren cambiar el mundo desde su mando a distancia.Así que salimos a la calle otra vez más contra este Hollande y sus promesas sin futuro ( qué poco me gusta que me mientan) , y me encanta ir de tu brazo, de ese tatuaje que revoluciona miles de mariposas en mi interior, auque no te lo confiese. Porque sé que de tu mano, y tras tantos años, e incluso con muleta, me siento bien, segura, y en plena confianza.
Me gusta abrazarte, y que sepamos que las concertinas no se pueden escudar tras los campos de nadie. Que los hemos visto, y no podemos permanecer sentados.Que la música es otra cosa, y lo sé cuando te oigo tocar con rabia la batería, y es la de un campo sin concentraciones ni hacinados cuerpos de desdichas.
París nos lo puso bonito y todo, sol radiante, sonrisas, ganas de manifestarle al mundo nuestro desacuerdo. De barrer tanto recorte y tanta mentira.
Me da igual la indiferencia en la que muchos se arropan y por lo general en todo sentido.Para mí esa gente, sólo son pedazos de carne.Sé que sólo el grito es capaz de hacer volar las alas inquietas y rebeldes de
Que callando, ellos se fortalecen... y crecen, y se multiplican, y se hacen cada vez más grandes.
Y hasta la Tour Eiffel a nuestro paso, nos hizo un guiño ;-)