Tocarte de luna
de luna llena
salir al patio desnudo de focos
y poder leer tu cabello
tu mirada que dice noche
y conjugar tu cuerpo
recostado en ese viejo helecho
tocarte los pechos blancos
de noche blanca
de un alma tibia y sin color
darte de nombre mi propia alma
y bautizarte en mí
y que me esperes silente
como la noche
y con tus muslos desnudos
y abiertos.
Rubén Callejas