El actor presenta en Florencia 'Inferno', la tercera entrega cinematográfica del personaje de 'El código Da Vinci'
ÁLVARO P. RUIZ DE ELVIRAFlorencia 11 OCT 2016 - 12:07 CESTTráiler de 'Inferno'. En la fotografía, Tom Hanks en la presentación en Florencia. FOTO: CHRISTOPHER POLK / VÍDEO: SONYTom Hanks (1956, Concord, EE UU) es el héroe cotidiano de América. Lleva años siéndolo con sus personajes corrientes, comunes, personas con las que cualquiera puede sentirse identificado, en ningún caso con superpoderes, fuerza inhumana o habilidades extraordinarias. Desde el enfermo de Philadelphia al piloto Sully en la última película de Clint Eastwood (papel que le puede otorgar su sexta candidatura al Oscar) pasando por el profesor de instituto que debe liderar a un grupo de soldados en el desembarco de Normandía en Salvar al soldado Ryan. Lo más cerca del arquetipo de héroe en su carrera es Robert Langdon, creado por el escritor Dan Brown en su saga literaria de El código Da Vinci. Un personaje que ha retomado por tercera vez en Inferno (estreno 14 de octubre en España). En esta tercera entrega, Langdon debe salvar a la sobrepoblada humanidad de una amenaza global. “No puedo ser el tío más duro del mundo. Con este físico y a mi edad es la mayor oportunidad para mí de poder interpretar al héroe que lo sabe todo”, dice el actor.Hanks entra en la sala del Fuerte Belvedere de Florencia donde atiende a los periodistas con las gafas de sol puestas y ejerciendo el mismo encanto que media hora antes mostró en una rueda de prensa en uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad renacentista: el salón de los Quinientos del Palazzo Vecchio, lugar clave también en la película. Siempre dispuesto a contentar a todo el mundo, a mitad de la primera respuesta y tras un gesto de una de sus publicistas, se retira las gafas y comienza su profesional exhibición de cómico simpático. “Lo que me encanta del profesor Langdon es que ha envejecido, pero lo ha hecho con sus propias reglas. Todavía vive solo y sigue fascinado por la simbología, sigue apreciando pautas en la historia y en la arquitectura”, defiende Hanks a su personaje.“Lo único que busco como actor, en cualquier papel, es la autenticidad, que haya un reflejo del comportamiento humano” comenta Hanks, sentado junto al director del película, Ron Howard (Una mente maravillosa). En Inferno, Langdon se enfrenta a los misterios del poeta renacentista Dante y su visión del infierno y a la amenaza de Zobrist, un villano preocupado porque la humanidad no hace más que multiplicarse. Un antagonista que a Hanks le hubiera gustado interpretar para no ser siempre el héroe corriente: “Los grandes villanos que yo podía haber interpretado en el cine son los que tienen sentido, los que hacen lo que hacen por un buen motivo que se pueda entender. La exposición de Zobrist al principio de la película es verdad, es algo matemáticamente puro”.Omar Sy, Irrfan Kahn, Ron Howard, Tom Hanks, Felicity Jones y Dan Brown en la presentación de 'Inferno' en Florencia. CHRISTOPHER POLK SONY