Trabajo

Publicado el 17 noviembre 2014 por Cads @CaDs

“Yo no sería capaz de estar más de una semana sin trabajar”
El otro día estaba meditando sobre esta frase que de vez en cuando se me escapa. Digo que se me escapa porque creo que la digo sin pensar demasiado.
Ahora mismo, me ha dado por darle vueltas y me asusta un poco descubrir todo lo que se esconde detrás de esta simple aseveración.

Quiere decir acaso que sería incapaz de disfrutar de tiempo para mí durante más de una semana?
Me he vuelto tan adicto a mi rutina de al menos 8 horas en la oficina que, de verme en la situación de no tener oficina hacia la que conmutar a diario, me encontraría sin saber muy bien qué hacer?

No os ha pasado que, tras pasar un par de semanas de vacaciones, te encuentras “con ganas de volver al trabajo? o con ganas de volver a la rutina”?

Me gustaría saber cuanto tiempo puedo estar sin realmente hacer nada relacionado con el trabajo. Dedicarme a descansar, a meditar, a leer, a pasear y a disfrutar de un tiempo 100% dedicado a mi mismo.

Será que me he vuelto adicto en cierto modo al trabajo?
Y quien dice trabajo dice tener algún lugar o actividad que me proporcione una sensación de “haber logrado algo”.

Me da por pensar a qué se dedicarían mis antepasados 5 o 10 generaciones antes.
Se preocuparían si se vieran en la situación de tener tiempo libre en sus manos?

Cada día este ciclo de prestar 8 horas de mi tiempo durante 5 días a la semana a otras personas se me antoja más extraño.
Ojo, no digo que no quiera trabajar, sino más bien me pregunto cuándo hemos asimilado a nivel de sociedad, el que sólo hay un puñado de maneras válidas de hacer las cosas en lo referente a trabajar.

En Japón me sorprende la cantidad de empleados a.k.a. “salaryman” que abarrotan los trenes y pululan por las estaciones a primera y última hora del día.
Es casi literalmente un ejército de soldados avituallados con trajes de chaqueta negros y maletines.

Pero a la vez me sorprende la cantidad de freelancers y gente que ha encontrado su manera de trabajar, sin duda a su manera, y prosperar aquí sin necesidad de arrendar 1/3 de su vida durante cinco días a la semana a lo largo de una buena cantidad de años.

En fin, feliz lunes