Tres sombreros de copa.

En la tarde-noche del Jueves pasado leía la obra de teatro con titulo "Tres sombreros de Copa", esta es una obra de Miguel Mihura que fue publicada en 1932 durante la Segunda República, pero que no fue representada hasta 1952 durante el gobierno del general Francisco Franco, ya que era una obra considerada como bastante moderna para aquel entonces.
La obra narra la historia de un señor de nombre "Dionisio", que el día antes de su boda acude a un hotel a descansar cerca del pueblo en el que habitaba su comprometida con sus padres. Dionisio ya se había alojado en este hotel anteriormente, por lo que el dueño Don Rosario lo conocía. Don Rosario, el dueño del hotel es una persona que tiene un poco de pluma y Miguel Mihura le da ese toque utilizando expresiones que llaman bastante la atención del lector e incluso le dan gracia a la obra, también situaciones en las que Don Rosario le da a Dionisio un beso de buenas noches, como si se tratara de alguien querido y le ofrece quedarse allí en la habitación hasta que se duerma el personaje, incluso mencionando que a veces Don Rosario cuando sus huéspedes están constipados les invita a dormir con ellos para darles calor. 
La obra se desarrolla de la noche a la mañana, pero durante la noche otros huéspedes del hotel interrumpen las horas de sueño de Dionisio, y entre el resto de huéspedes se encuentra una chica joven de unos 18 años, muy guapa y de nombre Paula. Dionisio no le dice a nadie sobre su boda, y Paula descubre algo diferente en Dionisio al cual le invita a irse por ahí los dos juntos, y Dionisio miente y miente para no quedar descubierto en toda la noche hasta que al final es pillado, cuando el padre de la prometida se presenta allí y Dionisio piensa que Paula no le escucha, pero sí estaba escuchando por lo que Paula se enfada. Al final Dionisio reconoce que quiere escapar con Paula explicándola que el se casa por que cree que casado será feliz, que el vive infeliz, pero que se arrepiente de querer casarse, que quiere escaparse con ella. 
En pocas palabras cambia de opinión de la noche a la mañana. Yo he sacado una conclusión de todo esto, aparte de que la obra en si es muy buena, muy entretenida, he llegado a la conclusión de que esta situación que le ocurre a Dionisio nos ha ocurrido a todos, tal vez no en nuestra boda pero si en el día a día, porque todos hemos pensado que el mejor modo de hacer las cosas era uno, o el que más feliz nos haría y luego nos hemos dado cuenta de que esto no es así, o nos han hecho ver lo equivocados que estábamos. 
Por eso insisto nuevamente en el pensar las cosas al hacerlas, el ver como puede afectar, que hay días que a lo mejor la decisión no influye mucho algunos días, pero que otros puede ser un auténtico problema y podemos ocasionar grandes disgustos o problemas.