¡Que ganas tenía de enseñaros y hablaros de mi nuevo tuneo!
Llevo una temporadita con una fiebre de tuneos imparable y como las cosas hay que hacerlas a medida que te surgen las ideas (porque si no te emperezas y ya no haces nada), llevaba un tiempo queriendo hacer cambios en uno de mis baños y aprovechando esta racha tan trabajadora que tengo, decidí que era el momento de ponerme manos a la obra.
Tras buscar por internet y en varios almacenes de muebles de segunda mano y no encontrar nada que nos sirviese (por medidas más que nada), finalmente encontramos una ganga estupenda en un "Rastro Reto" que hay en un polígono de Vallecas (Madrid)... ese sitio era el paraíso para gente como nosotr@s que nos encantan los muebles con historia y solera... un almacén enorme lleno de tesoros vintage a muy buen precio, listos para darles una nueva vida.
Yo iba con la idea de comprar una cómoda, pero esta venía con espejo por el mismo precio, así que me lo traje y ya veré que hago con él, porque el que tengo ahora en el baño, quiero conservarlo porque me gusta mucho (ya os explico ahora que voy a hacer con el mueble).
- Sacar el viejo lavabo y el bidé para ganar más espacio en el baño (el bidé no lo usamos mucho y ya tenemos uno en otro baño).
- Tunear y convertir la cómoda en un mueble con lavabo. Os muestro los pomos, el lavabo (exento) y el grifo que vamos a utilizar para transformar la cómoda:
Elegí un lavabo de sobreponer y no uno encastrado porque quería ganar altura al mueble y porque de este modo, aprovecho mejor los cajones (al no tener que hacer tanto espacio para el lavabo dentro del mueble, tenéis que pensar que ahí tiene que ir el desagüe).El grifo me pareció precioso y una buena forma de dar contraste al mueble, que es de líneas clásicas.Elegí dos modelos de pomos diferentes para darle un punto más original mueble.Me he pasado horas mirando fotos en Pinterest para inspirarme y hacer mi propio mueble con lavabo. Como podéis ver, sirven muchos tipos de muebles y todos se pueden adaptar a las medidas o necesidades que tengáis.
En mi caso, necesitaba un mueble que tuviera capacidad de almacenaje, para guardar sobre todo toallas y algún que otro potingue, es por eso que elegí una cómoda con cajones, para aprovechar el espacio al máximo. También quería que tuviera patitas, aunque no muy altas, porque aligeran mucho y además puedes limpiar fácilmente por debajo del mueble.