Hoy vi tus fotos nuevamenteHoja a hoja mis dedos tocaban tu caritaY tus ojos, como siempre, miraban a otro lado
Nunca me miraste, si eras ciegaPero abrí yo los propios luego de embarrarme contigo.
Ya pasó el tiempo, veo tu álbum de fotos.Y ahora el barro es costra desganada.Y no lloro, mas sonrío.En realidad nunca fui un hijo de puta.