Twitter: ¡Vive y deja vivir!

Publicado el 08 diciembre 2013 por Blancamiosi
Hace tres años, cuando Amazon iniciaba el servicio de auto-publicación, todo era más sencillo. Me refiero a ocupar determinados lugares en sus famosas listas, sea en la general o en las que tienen por géneros. Hoy en día es un poco más complicado. Son miles de escritores los que desean publicar en esa y otras plataformas que se han sumado al carro de la publicación independiente, en la que no se necesita estar respaldado por una editorial para poder vender sus obras.Traigo esto a colación porque a pesar de la información que de manera continua aporto por medio de mi blog, todavía hay escritores que me escriben al correo para pedirme consejos acerca de cómo hacer para que sus libros se vendan o que figuren en las listas.Quiero decirles a ellos y a otros que también desean sumarse al carro de la publicación independiente, que no hay un secreto especial, no hay una varita mágica que hará que sus libros suban como la espuma y se mantengan arriba. De la única forma que lograrán hacerlo es como he dicho tantas veces, ofreciendo un buen producto, que puede ser empezar por una portada atractiva, una sinopsis corta y concisa, sin interminables frases halagadoras de otros escritores, o peor aún, que sea recomendada como la mejor lectura por el propio autor (no hay nada que suene más falso y chocante que eso); lo principal es que sea una buena novela. Hay muchos ejemplos de buenos escritores, no he tenido la suerte ni el tiempo de leerlos a todos pero de los que sí, he reconocido de inmediato que son libros bien escritos y que llegarán a ocupar su sitial en las listas. No voy a mencionar nombres porque dejaría algunos por fuera, pero la promoción constante no es el único medio para permanecer en las listas. Ayuda a llegar, eso sí. Pero son los lectores quienes operarán la magia del boca-oreja.Estuve leyendo hace poco en el blog de una escritora amiga que pensaba con cierta frustración que al tener sus obras manejadas por una editorial ella podría dedicarse a lo importante: a escribir. ¡Qué desencanto al comprobar que no era así! Sus novelas que antes del fichaje ocupaban los primeros lugares hoy andan perdidas fuera de las listas, pues la editorial nunca dedicará siquiera 10 minutos al día en promover sus obras como lo haría ella misma. Esa experiencia también la tuve yo. Pero la suerte hizo que uno de los dos libros que tengo por la editorial remontase la cuesta al cabo de un tiempo y se situase entre los primeros manteniéndose ya varios meses entre los primeros. Del otro libro mejor me olvido. Porque aparte de no figurar como si fuese de mi autoría en La Casa del Libro, sino de una autora de nombre anglosajón, parece que no es prioridad de la editorial. Ni siquiera figura en mi página de autor.¿Cómo puedo confiar mis obras a una editorial? Sé que algunos que lean este post pensarán que me doy grandes ínfulas al decir que no deseo trabajar con editoriales.  Tampoco deseo agentes literarios. Ni unos ni otros hacen nada para promovera un escritor a menos que el libro tenga la suerte de caer en las manos apropiadas y decidan hacerle una gran campaña y convertirlo en un superventas. Obviamente, debe ser un gran libro. Pero hay editoriales que se equivocan constantemente, más de lo que podría suponerse. Es lo que hicieron con mi novela El manuscrito I El secreto, que cuando la publiqué por mi cuenta y riesgo se convirtió en un bestseller  y de inmediato una editorial se ofreció a publicarla.  Entonces yo aún creía en ellas. Hoy prefiero actuar por mi cuenta. Sé que el trabajo es el mismo: Escribir, corregir, buscar ayuda para la corrección de estilo, encontrar una buena portada, hacer una sinopsis, publicarla y promocionarla: algo que ellos no harán por mi novela.Para quienes piensen que las horas que se pasa uno en Facebook, Twitter, Pinterest, Google+ o el blog es pérdida de tiempo, les aseguro que no es así. Hoy en día forma parte del trabajo integral del escritor. No sientan el tiempo pasado en Twitter como pérdida. A menos que actúen de una manera que de verdad no les sirva de nada. Y, créanme, hay muchos que pasan horas promocionando SUS libros y no obtienen ni una miserable venta.¿Cuál es el motivo? El principal es porque no se ocupan de buscar o conseguir los seguidores apropiados. Lo que sigue es que se ocupan únicamente de hacer twitts a su propia obra, y en otros casos piden descaradamente ayuda, sin hacer ellos nada por los demás.  Es como pedir limosna. Así lo veo yo. Un escritor que desea obtener ayuda debe ser recíproco. Si le interesa ser ayudado debe adelantarse, tuitear a otros, utilizar la creatividad para promover otras novelas (sin olvidar colocar el nick para que éste sepa que existe), reinventarse cada cierto tiempo. Hoy Twitter nos da la opción de  publicar imágenes que quedan abiertas, lo cual es muy llamativo para anunciar libros, siempre y cuando las portadas o el aviso sean atractivos. De manera que: ¡Adelante! No se hagan eco de las personas que aparecen de vez en cuando en Twitter quejándose de la publicidad de libros, recuerden que es la única ventana que tenemos, la más visible, y no podemos perder esa oportunidad. Los que se quejan generalmente tienen 90 o poco más de seguidores, de manera que su time line se le llena de avisos, pero… ¿a fin de cuentas, no es Twitter un tablón de anuncios?  Yo nunca he dejado de seguir a alguien porque ponga sus avisos.  Sin embargo noto que muchos lo hacen, pero son siempre más los que me siguen que los que dejan de hacerlo, por el momento cuento con la modesta cifra de 4379 seguidores, tal vez en un par de horas baje la cifra porque empezaré a tuitear, pero sé que mañana tendré otros más que se irán sumando. Eso sí. Si veo que alguna persona se queja por mis anuncios, es simple: dejo de seguirla o le digo que me bloquee, no deseo perturbar la tranquilidad de nadie. Es muy sencillo vivir en paz, lo mejor es no entrar en discusiones: Vive y deja vivir.¡Hasta la próxima, amigos!Blanca Miosi