Tres semanas después, unos niños encontraron su cadáver.
«Voy a emular a Ofelia. Ya no soporto la idea de volverme loca como les ocurrió a Hölderlin o Nietzsche», se dijo mientras se internaba lentamente en las frías aguas del río Ouse con unas piedras en los bolsillos de su abrigo.
Tres semanas después, unos niños encontraron su cadáver.
Tres semanas después, unos niños encontraron su cadáver.