Vero y Geles llegaron a las 8:30 de la mañana y mi chico y yo fuimos a buscarlas al aeropuerto con Lucas, nuestro perro. A las dos les encantan los animales, por lo que Lucas fue recibido con muchas caricias, achuchones y piropos, pena que no hicimos ninguna foto con él, nos liamos a hablar y se nos fue el santo al cielo.
Del aeropuerto nos fuimos a desayunar, a una cafetería de la zona de malasaña y aunque pasamos un rato super ameno y divertido, algo hizo que por un momento nuestras risas se truncaran. A Geles le desapareció su bolso y pronto nos dimos cuenta de que se lo habían robado, dentro de la cafetería, que por cierto, estaba prácticamente vacía, pero hubo quien desde fuera ya vio el bolso de Geles colgado de su silla y entró con toda la mala leche del mundo a robárselo, utilizando de coartada, entrar a la cafetería a por un botellín de agua. La verdad es que fue un bajonazo enorme ver a la pobre Geles pasar ese trago y darse cuenta de todas las cosas que llevaba dentro de su bolso, como los billetes de vuelta a Menorca, toda una faena que finalmente pudimos solucionar y terminamos denunciando en la comisaría más cercana... desde luego, nada que ver con nuestros planes para ese día, aunque la verdad es que a pesar del disgusto, Geles nos dio toda una lección de saber estar y de lo negativo de ese momento, sacamos la parte más positiva con una gran sonrisa y llevando a cabo todos los planes que teníamos en mente. Visitamos varias tiendas chulas: La Turmix y La Recova, paseamos por la Gran vía, plaza mayor, sol, la latina y nos fuimos al museo del romanticismo, comimos en Malasaña y terminamos la tarde en el mercado de fuencarral, mirando trapitos jejejeje
Que corto se me hizo el día, que agradable es estar con gente con la que te sientes tan a gusto, tan en tu onda y que bonito es notar que ese cariño que nos tenemos, crece día a día, a pesar de separarnos tantos kilómetros. Esa es la verdadera amistad.
Os dejo con unas fotitos de ese día tan especial para mí y es que ya se ha convertido en tradición juntarnos las tres en Navidad. ¡¡Que majas mis chicas!!