Era Jueves y este fin de semana no habíamos decidido subir a la parcela de la montaña, ya que teníamos tareas en casa, aparte del gasto que supone subir a la casa de campo. Así pues nos quedaríamos en casa y adelantaríamos las tareas domésticas, cuando el Jueves en la noche llaman a la puerta de casa. Me extrañó pues era la hora de la cena.
Fui a abrir y era Nuris la vecina de enfrente que me preguntaba por mi esposa….
La_firma
Nos quería anunciar su próximo compromiso matrimonial con su pareja Francisco con quien ya llevaba conviviendo durante más de dos años y a la vez invitarnos a la boda que tendría lugar en el ayuntamiento de la localidad el mismo ´sábado de esa semana. no hacía falta que colaborásemos con dinero debido ya que conocían personalmente nuestra situación económica y sabían que no podríamos participar como hubiésemos querido.
Les dijimos que estaban en lo cierto y les agradecimos la deferencia y nos despedimos hasta el Sábado. Una vez en casa Cynthia me dijo que de todas formas no le hacía mucha gracia la asistencia a la boda ya que seguramente haría frío y no tenía nada elegante que ponerse, aparte tendría que cepillarse el cabello y eso demoraría su tiempo.
El alcalde hace entrega del sobre.
Llegó el Sádado y no madrugamos ya que nos levantamos a las 10 de la mañana, me duche y me puse un chándal para sacar a pasear a “Sari”, mientras mi esposa miraba que ropa se ponía y se lavaba y cepillaba el cabello.
El caso es que llegué con la perrita y todavía continuaba con el cabello, no quería decirle nada porque sino la pondría más nerviosa todavía; pero lo cierto es que ya eran las 12:30 pasadas.
Fui a cambiarme y cuando ella estaba lista eran casi las 13 horas. La hora prevista de la ceremonia; por lo que como se nos hizo tarde me dijo que fuésemos con la moto, al ser más rápido.
Cuando llegamos algunos invitados estaban todavía en la puerta y subiendo por el ascensor y es que aunque eran las 13:20 horas y nos habíamos retrasado, habíamos tenido suerte de que la anterior boda todavía continuara celebrándose.
El Restaurante
Por mi parte me había llevado la cámara fotográfica con todos los accesorios para obsequiar a los novios con un reportaje fotográfico ya que no llevaban fotógrafo. Así pues yo sería el fotógrafo oficial de la celebración.Por fin terminó la boda anterior y llamaron a los novios para celebrar la boda civil. Yo cámara en mano iba inmortalizando cada momento. Aparte de los novios a los únicos que conocíamos eran a los vecinos de la puerta 15 que eran ecuatorianos y ya llevaban viviendo en la finca con nosotros más de 6 años.
Terminó la ceremonia tal y como suelen ser las ceremonias civiles, sin mucho protagonismo pero eso sí con mucha alegría.
Banquete de Bodas
Éramos tan solo 28 personas ya que solamente estaban por parte del novio sus 6 hermanos y por parte de la novia nosotros y los vecinos, por lo que era una boda bastante íntima.
Al finalizar el convite y después de los cafés y licores salimos los novios junto al fotógrafo a los jardines del recinto exterior para hacer el reportaje fotográfico que por cierto creo que salió excelente ya que estaba atardeciendo y la luz era ideal.
En fin podría decir que fue una boda como todas las demás; pero no, esta fue especial, me sentí más a gusto que si fuera la de uno de mis amigos o de mi familia, porque allí no nos conocía nadie y nos encontramos súper cómodos y a gusto.
La Fuente
Por nuestra parte aunque no hemos podido colaborar con dinero en la boda tal y como nos hubiese gustado. Lo haremos de otra manera mucho más especial y es con el reportaje de fotos que ya tengo preparado y que ya he encargado por internet un álbum fotográfico para los novios con las fotos más representativas.
¡Espero que les guste!