Como suelo decir, hay dos tipos de libros: los que se devoran y los que se saborean. Los primeros son aquellos que te lees en un santiamén, mientras que los segundos dejan un poso en ti que los convierte en inolvidables. Un haiku para Alicia pertenece al selecto grupo de novelas que reúne las dos características. Lo leí en apenas dos horas y aunque ya hace una semana de eso, no puedo quitármela de la cabeza.
Gracias a Neo Plataforma por el ejemplar.
Es genial cómo Miralles es capaz de crear una novela tan bonita con una historia tan sencilla. Genís anda perdido hasta que conoce, casi por casualidad, a las "buenas sensaciones", un grupo liderado por la misteriosa Alicia. En él, hablan de temas como el dinero, la felicidad o el amor.
—Cuando uno se encuentra con la belleza de esta manera, siente un malestar, un picor en todo el cuerpo, y es porque vuelven a crecerle las alas. Por eso, si la persona que ha provocado en nosotros este milagro se aleja, no podemos soportarlo y enloquecemos tratando de recuperarla. Porque tan pronto como desaparece la fuente de belleza, los poros del alma por los que brotaban las alas se secan y se van cerrando hasta quedar como antes. Y vivimos nuevamente encerrados en la prisión del cuerpo. A esto, los humanos lo llamamosAmor
Y yo ahora debería explicaros más a fondo la trama, pero no puedo. Siento que os contase lo que os contase, estaría matando parte del encanto de la novela, porque es de esas a las que es mejor llegar casi en blanco. Por supuesto, aunque no desvele nada de la trama, sí tengo unas cuantas cosas que decir.
Como pasa en otras obras del autor, como Oblivion, es el personaje femenino el que resulta más atractivo. En este caso es Alicia, una joven misteriosa que además de cautivar a Genís, ha conseguido atraparme con su peculiar forma de pensar. Pero no sólo ella: Miralles tiene la habilidad de hacer que todos (o casi) los personajes te caigan en gracia. Pablo, el amigo de Genís, me ha arrancado más de una carcajada con sus gráficos de las pellas que hace, y el profesor Haiku me ha enamorado con sus reflexiones sobre la moral o los haikus.
Antes de terminar, voy a ser clara: ¿sabéis lo que me encanta de Francesc Miralles? Que escribe juvenil sin tratar a los lectores como si fueran tontos. Se atreve a tocar temas espinosos con una mirada
Como dijo el poeta francés Joseph Roux, existen dos tipos de autores geniales: los que piensan y los que hacen pensar. Francesc Miralles es, simplemente, un genio al cuadrado, y Un haiku para Alicia es la prueba definitiva.
T.: Entiendo que no tienes razón. A.: Es verdad, no tengo. Amar es suficiente para mí. Quien ama no necesita razón, ni tener nada, porque sin tener nada lo tiene todo.
Historia:
He intentado escribir también un haiku para Alicia, pero me he liado, una cosa ha llevado a la otra... Y el resultado ha sido un tanto distinto a lo esperado. Echadle un ojo (o los dos). Mientras tanto, aquí seguiré, buscando un haiku para