Vista de la Catedral desde el Postigo
Todos los días paso por el mismo lugar y no me paro a contemplar las maravillas que se alzan ante mis ojos. Unas veces por prisas, otras porque voy absorta en mis pensamientos y otras porque miro sin mirar. Ayer realicé una pequeña excursión con unos amigos, con guía incluido, que muy pacientemente nos contó muchas anécdotas, historias y leyendas referente a las calles y edificios que se encuentran en la ciudad. Nos contó bellas historias sobre la antigua Fábrica de Tabaco ( ahora Universidad de Sevilla ).Fachada antigua Fábrida de Tabacos
Rodeamos la catedral y observamos los detalles de algunas de sus puertas, visitamos Santa Cruz, nos asomamos a Triana.Vista de Triana
Nos acercamos a la Alameda, y recorrimos muchas callejuelas del centro que están cargadas de historias divertidas y apasionantes. Visitamos el hospital de la Caridad, cuya iglesia nos dejó perplejos.Hospital de la Caridad
Y también hubo tiempo para disfrutar de una gastronomía para gente con buen paladar. Aprendí mucho en la visita, recordé cosas que había olvidado , disfruté de una compañía exquisita y sobre todo volví a mirar mi cuidad con ojos de admiración. ¡ Cuánta historia nos rodea! Si algunos muros hablaran... qué de cosas interesantes nos revelarían. Quizás porque estoy tan acostumbrada a verlo, que a veces olvido la importancia que tienen, los años de historia, las diferentes culturas que aquí vivieron y el legado tan amplio y rico que nos dejaron. Su influencia en nuestras costumbres, en nuestro lenguaje, en nuestra forma de cocinar y en como ahora conviven los histórico con lo moderno. Y en como algo extraordinario se convierte en algo tan cotidiano.Una estampa cotidiana en la Plaza del Triunfo
Las setas de la Encarnación
Me gusta recordar de vez en cuando este tipo de cosas porque me recuerda cuán pequeñita soy y lo mucho que me queda por aprender cuando creo que ya lo he visto todo. Todos los días se aprende algo nuevo y ayer aprendí mucho sin libros ni exámenes, de la mejor manera que se pueda aprender que es paseando, escuchando y observando. Y qué les voy a decir yo de mi ciudad que no sepan ya... Que es bonita, que tiene un clima privilegiado ( exceptuando algunos días de verano ) que me encanta vivir aquí, que la eché mucho de menos cuando me tocó vivir fuera y que me gusta impregnarme de su aroma en cada paso que doy.
Y qué les voy a decir, si con decir Sevilla ya se dicen muchas cosas....
P.D. Para tod@s aquel@s que aún no conocen Sevilla y para l@s que viven aquí que la disfruten.