El escenario.
Oscuro y luminoso de pronto.Imponente.Aterrador.Liberador.Convierte unos breves momentos en toda una vida.Te muestra cosas que jamás creíste conocer.Te reta.Te sacude. Muestra tu verdad.Te hace brillar.U obscurecer.Te obliga a decidir.Toma todo de ti, y tú se lo das, hasta agradecido.Simplemente, te hace sentir vivo.
De alguna u otra forma, siempre que canto, pase lo que pase, así surjan mil cosas, termina bien. Termino llena de felicidad. Aunque se que me faltan cosas, aunque vea mis errores y empiece a planear como trabajarlos, como mejorar. Aunque haya personitas por ahí intentando arruinarme el momento, aunque me acaben de romper en mil pedazos, de pronto, sale bien. Me levanta. Y me hace feliz. Muy feliz.
Cuando me subo a un escenario, el sentirlo bajo mis pies, ver las luces en mi rostro, escuchar la música envolverme... Vuelo. Es difícil e innecesario de explicar... es solo que, ahí es donde me gusta estar. A pesar de las dificultades (que son muchísimas), aunque sea un lugar donde es duro estar. Me encanta. Me apasiona. Lo que descubro ahí no se descubre en ningún otro lugar. Es un lugar donde dos minutos son un día entero y una hora son como diez años. Un lugar donde todo se siente multiplicado por mil. Un lugar donde muestras toda la porquería que eres para convertirla en oro. Un lugar donde brillas con luz propia. Donde todo es posible, te atreves a hacerlo. Definitivamente, un lugar para valientes.
Ella lo sabía muy bien.