Quería capturar los sonidos de aquella
-esta- habitación blanca.
Quería capturar los sonidos
Estridentes de las paredes
Vetando la entrada al sueño.
Cada gota de sonido que caía
De la mal dada pintura.
Almacenar la poca luz
Que la ventana sombría
Dejaba recorrer por las paredes
Como en una danza, al ritmo
Del murmullo sofocado de los lunes
Embriagados en Van Dyck.
Quería resguardarlo todo,
Abrazarlo todo en un cuaderno
que todavía conservaba
el olor precipitado de la imprenta.
Y a pesar de aquél intento
De fotografiar todo aquello con palabras
Fui capaz de poco más
Que atinar a tientas en la noche
encontrar el reloj y maldecir
Que sólo me quedaban unas horas
Para intentar
Conciliar el sueño.
A.M.