Revista Literatura
Aspiración de emprender mi vuelo al infinito,
Y caminar en las azuladas nubes de algodón,
Disfrutar de las estrellas de ese cielo bonito,
Escuchando de los ángeles una suave canción.
Viajar despacio, sin destino ni meta definida,
En un sopor de profundo silencio y meditación,
Olvidar de pronto que llevo el alma adolorida,
Y dejar la nostalgia que me hace perder la razón.
Confundirme en lo recóndito del firmamento,
Para gozar las delicias del Cosmos misterioso,
Debe ser tan perfecto existir sin sufrimiento,
Gozando de la armonía y el paisaje hermoso.
Cuántas horas soñando en la paz verdadera,
De la existencia que inconforme se debate,
Ansiando la llegada de la celestial primavera,
Para culminar victorioso ese cruel combate.
Apetezco de las cometas su armonioso vuelo,
Son las sublimes que viajan sin preocupación,
Su límite se fija en llegar incólumes al cielo,
Y entregar al Dueño del universo el corazón.
Quiero mitigar de la vida todos los pesares,
Y no despertar de modo alguno esta quimera,
Subsistir en armonía en el confín de los mares,
O quizá correteando raudo por alguna pradera.
Anonimo